Articulo publicado el 26 de Marzo de 2019
Respirar puede matarte. Por más extraño que suene, es así. En algunos sitios del mundo la acción más vital para el cuerpo humano puede causar daños irreversibles, e incluso la muerte.
La polución del aire alcanzó niveles elevados de toxicidad, a tal punto que la World Health Organization (WHO – Organización Mundial de la Salud ) advierte que una de cada ocho muertes a nivel mundial ocurren por inhalar aire contaminado.
El organismo considera que la contaminación atmosférica es el riesgo ambiental para la salud más grave del mundo. Unas siete millones de personas mueren como consecuencia de esta problemática.
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México es el país de América que presenta algunos de los peores índices de calidad de aire. En este país ocurren unas 9,300 muertes al año por causas asociadas al fenómeno, según el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA).
Por eso no llama la atención que sea aquí donde se creó uno de los inventos que puede ayudar a revertir esta situación: Biourban, un árbol robot capaz de hacer el trabajo de 368 árboles ‘comunes’.
El Biourban tiene múltiples utilidades, por lo que sus mercados potenciales son infinitas © Foto : BiomiTech
“El sistema fue concebido a partir del grave problema de contaminación ambiental que existe en el mundo. Las políticas públicas para hacer frente a este tema son muy ineficientes, por lo general miden la contaminación en vez de disminuirla”, dijo a Sputnik Jaime Ferrer, cofundador de BiomiTech, la empresa que lo produce. “Nosotros venimos a intentar cambiar eso”, el sostuvo.
Luego de tres años de estudios, esta empresa mexicana desarrolló un árbol mecánico que puede ayudar a remediar los gases contaminantes que contribuyen a provocar la muerte de 1.7 millones de niños menores de cinco años en todo el mundo.
Biourban surgió en México, un país cuyas ciudades se enfrentan al desafío de reducir la intoxicación del aire © Foto : BiomiTech
El aparato mide cuatro metros de altura y tres de diámetro en la copa, contiene cinco cilindros de 100 litros cada uno. En su interior se alojan algas vivas que cumplen con los procesos de fotosíntesis las 24 horas del día, los 365 días del año.
“La polución entra en los cilindros y las algas la absorben, la procesan y la devuelven en forma de aire filtrado. Para que este proceso ocurra incluso de noche se iluminan las algas con energía obtenida por medio de paneles solares, algo que da autonomía al sistema”, explicó Ferrer.
Cada árbol tiene un costo de 50.000 dólares y una vida útil de 20 años, por lo menos © Foto : BiomiTech
Dependiendo de la contaminación del ambiente, para que cada Biourban siga funcionando de forma correcta, se debe hacer un mantenimiento cada tres o cuatro meses. Se realiza limpieza de paneles y se retira el exceso de algas, que al ser un organismo vivo se reproduce al interior de los cilindros.
Pero incluso esto se aprovecha, ya que estos excedentes pueden ser utilizados como abono para la tierra. De este modo, la vida útil de cada árbol mecánico de 50,000 dólares puede extenderse por más de 20 años.
Esta pieza de ingeniería mexicana ha sido merecedora de premios fuera de sus fronteras
© Foto : BiomiTech
La contaminación atmosférica en las ciudades y zonas rurales de todo el mundo causan 4.2 millones de defunciones prematuras al año. El 91% de ellas se producen en países de bajos y medianos ingresos.
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En la región, la Pan American Health Organization (PAHO – Organización Panamericana de la Salud), da datos más concretos. En América, la contaminación atmosférica es responsable de 93,000 defunciones anuales en países de ingresos bajos y medios, y de 44,000 en países de ingresos altos.
El Biourban fue implementado en la ciudad de Puebla y en otros países se analiza su ingreso al espacio urbano © Foto : BiomiTech
“La población mundial está muriendo lentamente al respirar agentes contaminantes como micropartículas que se alojan en los pulmones. Tan solo en México mueren miles por año por problemas asociados a la contaminación del aire, en un fenómeno que se ha denominado la muerte lenta”, señaló Ferrer.
Es por eso que este invento mexicano ha acaparado la atención del mundo. Obtuvo premios en Reino Unido y Suiza. Puebla es la única ciudad donde funciona en México, pero ya hay instalados algunos en Turquía, Panamá y Colombia.
Otros países como Inglaterra, Francia y la India empezaron negociaciones para instalar en las calles de sus ciudades la primera tecnología a nivel mundial capaz de disminuir la contaminación en el aire.
Fuente: Sputnik
