El gobierno del Perú está abandonando la costosa vacuna Covid-19 AstraZeneca, ya que la farmaceutica britanica no proporcionó datos de prueba y está ofreciendo muy pocas dosis.
Hablando el Jueves, el primer ministro peruano Walter Martos declaró que la compañía multinacional farmacéutica AstraZenaca no había proporcionado al gobierno suficiente información sobre la vacuna candidata, y agregó que el precio era demasiado alto y la cantidad de dosis disponibles era limitada.
“Ellos nos estaban ofreciendo una cantidad muy pequeña de vacunas para el país en comparación con otros laboratorios que nos están ofreciendo mayores cantidades a menor costo”.
Martos también afirmó que AstraZeneca requería un pago anticipado sustancial que se perdería en caso de que la vacuna candidata no cumpliera con los estándares de seguridad requeridos.
El primer ministro dijo que el gobierno peruano había solicitado datos de prueba a la compañía farmacéutica, pero no habían sido ofrecidos. Martos añadió que otras empresas habían proporcionado los datos solicitados, pero AstraZeneca no.
Sus comentarios siguen a los de la ministra de Salud del Perú Pilar Mazzetti, quien afirmó que la falta de información significaba que no se pudo llegar a un acuerdo previo. Mazzetti también destacó las complicaciones reportadas en el ensayo de la vacuna AstraZeneca, señalando la muerte de un participante brasileño a principios de semana y dos casos de mielitis transversal en participantes del ensayo en Reino Unido.
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AstraZeneca, que desarrolló su vacuna junto con la Oxford University, había planeado realizar ensayos en Perú. Sinopharm de China ya está realizando pruebas en el país, y se espera que la multinacional estadounidense Johnson & Johnson haga lo mismo.
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El Perú ha sido uno de los países más afectados por la pandemia, pero la tasa de nuevas infecciones está disminuyendo. Martos dijo que un estudio había encontrado que el 35 por ciento de la población tiene anticuerpos Covid, lo que significa que ya habían sido infectados. Sin embargo, no había espacio para la complacencia, el advirtió: “Tenemos un porcentaje de entre 60 y 65 por ciento de personas aún susceptibles a ser infectadas.”
El miércoles, el país registró 2,991 nuevos casos y 47 nuevas muertes. Desde el comienzo de la pandemia, el Perú ha registrado 879,876 infecciones y 33,984 muertes. El Perú tiene la tasa de mortalidad más alta del mundo con respecto a la población total.
Fuente: RT