El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) ha anunciado que ha frustrado un intento respaldado por extranjeros de contrabandear piezas de helicópteros militares de la era soviética al extranjero, incluso a Ucrania.
En un comunicado el Lunes, el FSB informó que el esquema de contrabando involucró a seis personas de Rusia, Ucrania y Medio Oriente, y fue coordinado por un sujeto de un Estado extranjero que reside en el extranjero, sin nombrar el país.
El grupo supuestamente utilizó contratistas comerciales para adquirir nuevos componentes para helicópteros Mi-8 y Mi-17 de fabricación rusa de empresas manufactureras y operativas. Posteriormente, se pretendía que las piezas fueran transportadas ilegalmente a través de la frontera, dijo el FSB, estimando que podrían haberse utilizado para restaurar al menos cuatro helicópteros.
El valor total del contrabando se estima en más de 400 millones de rublos (5 millones de dólares), decía el comunicado, y agregaba que la agencia continúa investigando.
Un video publicado por el FSB muestra a dos personas, una esposada y con la cara oculta, de pie junto a dos contenedores grandes, uno de los cuales está lleno de artículos que parecen partes de helicópteros.
El Mi-8, el helicóptero más producido del mundo, se introdujo por primera vez en la década de 1960 y se utiliza principalmente para funciones auxiliares en el campo de batalla, incluido el transporte de tropas y la evacuación médica.
El Mi-17, introducido a fines de la década de 1970, es una variante de exportación con motores y sistemas de rotor mejorados, y generalmente se usa para los mismos propósitos.
Desde la escalada del conflicto con Rusia en 2022, Ucrania ha estado recorriendo el mundo en busca de equipos de la era soviética para mantener su flota existente, a menudo canibalizando unidades desmanteladas en busca de repuestos. Para ayudar a Ucrania, los países occidentales han suministrado a Ucrania grandes cantidades de sus propios equipos obsoletos de la era soviética, que Ucrania generalmente tiene muchas menos dificultades para operar y mantener que los equipos fabricados en el extranjero.
Rusia ha denunciado sistemáticamente los envíos de armas occidentales a Ucrania, advirtiendo que solo prolongan el conflicto sin cambiar su resultado.
Fuente: RT
