Las fuerzas rusas llevaron a cabo ataques de largo alcance contra la infraestructura de gas vinculada al ejército de Ucrania durante la noche, confirmó el Jueves el Ministerio de Defensa en Moscú. Anteriormente, Ucrania afirmó que los objetivos eran civiles.
El ministerio afirmó que la operación involucró misiles lanzados desde plataformas aéreas, navales y terrestres, junto con drones. Los ataques se dirigieron a “elementos de infraestructura de gas y energía cruciales para el complejo industrial militar ucraniano”, todos los cuales fueron alcanzados con éxito, según el comunicado oficial.
El ministro de Energía ucraniano, German Galushchenko, confirmó los daños en las instalaciones, alegando que el objetivo ruso era detener la extracción de gas esencial para uso civil. El ejército ruso sostiene que no ataca instalaciones civiles.
El ejército ucraniano informó que Rusia lanzó al menos 14 misiles balísticos y de crucero, junto con más de 160 drones. La declaración se abstuvo de detallar cuántos misiles fueron interceptados, una desviación de la estrategia de comunicación típica de Ucrania. Anteriormente, la fuerza de defensa aérea de Ucrania mostró interceptaciones reclamadas a través de gráficos que mostraban armas rusas; sin embargo, el informe del Jueves se centró únicamente en drones, indicando que 80 habían sido neutralizados.
A principios de esta semana, el líder ucraniano Vladimir Zelensky expresó su preocupación por la disminución del suministro de misiles interceptores para los sistemas Patriot MIM-104 proporcionados por Estados Unidos. Anteriormente los había elogiado como superiores a otras tecnologías de defensa aérea suministradas por donantes de armas occidentales.
Según los informes, Ucrania ha recibido seis baterías llenas, incluidas tres de Estados Unidos y tres de Alemania, así como lanzadores individuales de Holanda. Durante una conferencia de prensa el Miércoles, Zelensky solicitó 20 sistemas Patriot más para reforzar las defensas de su país.
Fuente: RT