El organismo de control de Internet ruso Roskomnadzor ha restringido el acceso a la app de mensajería Signal, citando problemas legales.
Signal ha sido promocionado durante mucho tiempo como un mensajero seguro, pero los críticos han advertido que fue desarrollado y mantenido a flote con fondos de la inteligencia estadounidenses.
En una declaración a los medios el Viernes, Roskomnadzor dijo que la prohibición se debía “a la violación de los requisitos de la legislación rusa, cuya implementación es necesaria para evitar el uso del mensajero con fines terroristas y extremistas.”
La declaración se produjo varias horas después de que los usuarios rusos de la app comenzaran a quejarse de las interrupciones.
Signal fue recomendado una vez por el denunciante de la NSA Edward Snowden y el magnate tecnológico Elon Musk como una forma de intercambiar mensajes lejos de las miradas indiscretas de las agencias de inteligencia. Sin embargo, las preocupaciones sobre la app se remontan tiempo atrás.
El Open Technology Fund que proporcionó capital inicial para el desarrollador de Signal a principios de la década de 2010 fue un recorte del US State Department, bajo la iniciativa ‘Internet Freedom’ de la entonces Secretary of State Hillary Clinton. Según el New York Times, Washington había tratado de crear “sistemas de Internet y telefonía móvil’ en la sombra ‘que los disidentes pueden usar para socavar a los gobiernos represivos” a través de revoluciones de color, por ejemplo.
En 2017, WikiLeaks reveló que los cifrados de Signal podían ser fácilmente eludidos por la CIA, utilizando las herramientas de piratería descritas en las revelaciones de Vault7. En Enero de 2022, el ejército suizo prohibió el uso de Signal, WhatsApp y Telegram, citando preocupaciones sobre la protección de datos.
Según los informes, la financiación del gobierno de Estados Unidos para Signal se agotó en Diciembre pasado y la app comenzó a tener problemas. Musk, que había respaldado la app en 2021, advirtió en Mayo sobre “vulnerabilidades conocidas” que “no se estaban abordando”.
Las autoridades rusas han tratado de tomar medidas enérgicas contra una variedad de plataformas de Internet occidentales en los últimos años, generalmente citando preocupaciones sobre la privacidad de los datos, así como sus políticas hostiles y censura en relación con el conflicto de Ucrania.
Fuente: RT