El presidente de Rusia prometió su apoyo al gobierno electo de Venezuela durante una llamada telefónica con el presidente Nicolás Maduro. También criticó la “intromisión externa destructiva” a la que ha estado expuesto el país.
El presidente ruso ha expresado su apoyo a las autoridades legítimas de Venezuela en este momento de crisis política que, según dijo, fue causado por una “interferencia externa destructiva que viola las normas más básicas del derecho internacional”.
Putin y Maduro también acordaron continuar la cooperación entre los países “en varios campos”.
Si bien la crisis política de Venezuela se ha prolongado durante meses, este año se ha profundizado tras la decisión de Estados Unidos de no reconocer los resultados de las últimas elecciones que llevaron a Maduro a inagurar su segundo mandato de seis años.
El miércoles, respaldado por Estados Unidos, Juan Guaido, el líder de la oposición que actualmente es el lider de la Asamblea Nacional, hizo un juramento y se declaró presidente interino mientras miles de personas salían a las calles pidiendo a Maduro que dejara el cargo.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció su decisión de reconocer a Guaido como el “presidente interino”, minutos después de que este último se jurara a si mismo. Mientras que el US Secretary of State, Mike Pompeo, instó a Maduro a renunciar y pidió al ejército del país que apoye los esfuerzos para restaurar la “democracia “.
En otras regiones de América, Argentina, Brasil, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Chile, Colombia, Paraguay y Perú siguieron su ejemplo a dos horas del movimiento de los Estados Unidos. Ellos fueron respaldados por la Organización de Estados Americanos (OEA) y Canadá.
Francia y Reino Unido se unieron al coro el jueves. Reino Unido afirmó que Maduro “no es el líder legítimo” de Venezuela, mientras que Francia dijo que la elección de Maduro fue “ilegal” y que “Europa apoya la restauración de la democracia”.
Venezuela ha sufrido un período prolongado de inestabilidad económica e hiperinflación, empeorada por la creciente presión externa. Los opositores de Maduro culpan de la crisis al gobierno socialista, que, por su parte, afirma que los disidentes son provocados deliberadamente por los Estados Unidos y otras potencias extranjeras.
Estados Unidos ha ampliado enormemente sus sanciones económicas contra el país rico en petróleo, proclamando “apoyo” hacia el pueblo venezolano al mismo tiempo. Dichas sanciones, sin embargo, han golpeado principalmente a los ciudadanos del país, argumentan muchos analistas.
Fuente: RT