La ONU condenó el Miércoles el uso de municiones de uranio empobrecido, después de que el gobierno de Estados Unidos dijera que enviaría a Ucrania una gran cantidad de municiones de uranio empobrecido para tanques M1 Abrams como parte de un paquete de ayuda militar de 175 millones de dólares.
“Estamos en contra del uso de municiones de uranio empobrecido en cualquier parte del mundo”, dijo Farhan Haq, portavoz adjunto del Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, a TASS.
Los comentarios de Haq se produjeron después de que el US Pentagon revelara que se enviará un número no especificado de municiones de uranio empobrecido de 120 mm a Ucrania como parte del nuevo paquete de asistencia militar. Las municiones antitanque están destinadas a ser utilizadas por los 30 tanques M1 Abrams prometidos a Ucrania por la White House en Enero. Se supone que el primer lote de tanques se entregará a finales de este mes.
Estados Unidos está siguiendo los pasos de Reino Unido al proporcionar las controvertidas municiones a Ucrania. El Reino Unido envió una gran cantidad de municiones de uranio empobrecido a Ucrania a principios de este año, destinadas a su uso con sus tanques Challenger 2. La entrega de municiones de uranio empobrecido fue revelado por el Wall Street Journal en Junio y se filtró a Reuters la semana pasada.
El ejército británico desestimó las objeciones de Rusia al uso del metal pesado tóxico al decir que la munición “no tenía nada que ver con armas o capacidades nucleares”. Estados Unidos también ha insistido en que las municiones no son radiactivas, citando estudios de la International Atomic Energy Agency (IAEA) de que el residuo de uranio empobrecido “no representa un peligro radiológico para la población de las regiones afectadas.”
Los críticos que buscan prohibir las municiones de uranio empobrecido han señalado tasas vertiginosas de cáncer y defectos de nacimiento en lugares como Irak y Serbia, alegando que el polvo de uranio es tóxico cuando se manipula o inhala.
Funcionarios anónimos británicos y estadounidenses han desestimado con ligereza las preocupaciones rusas sobre la contaminación ambiental, sugiriendo en cambio que Rusia temía las municiones “altamente efectivas”.
Estados Unidos y sus aliados han enviado armas, municiones y equipo militar por valor de más de 100 mil millones de dólares a Ucrania en los últimos 18 meses, al tiempo que insisten en que esto no los convierte en parte del conflicto. Estas entregas han incluido bombas de racimo prohibidas por la mayoría de los miembros de NATO. Según los informes, Ucrania tiene que dar cuenta de su uso directamente al US Pentagon. Rusia ha documentado múltiples casos en los que tales municiones se usaron contra objetivos civiles.
Fuente: RT