Una serie de empresas privadas han desplegado satélites espías sobre Ucrania para rastrear el movimiento de las fuerzas rusas desde el espacio, informó el Domingo el Wall Street Journal (WSJ). Algunos venden estos datos a gobiernos y medios de comunicación occidentales, mientras que otros los envían directamente al gobierno de Ucrania. Con la línea entre la observación y la participación en el conflicto borrosa, muchas de estas empresas mantienen su trabajo en silencio.
Cuando medios como el WSJ publican fotos aéreas de Ucrania, no confían en satélites espías operados por Estados Unidos y sus aliados. En cambio, están pagando a empresas privadas para que realicen este trabajo de vigilancia, y el periódico informa que compra imágenes directamente de Maxar Technologies.
Los satélites de Maxar, según el informe, pueden tomar fotografías desde el espacio con una resolución de hasta 12 pulgadas. Sin embargo, tales compañías no solo están desplegando sus satélites para ayudar a los medios de comunicación occidentales a aterrizar primicias, sino que también están suministrando inteligencia militar a Ucrania y a los aliados de NATO, que Ucrania está utilizando para atacar a las fuerzas rusas.
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Según el informe, Planet Labs PBC y HawkEye 360 están rastreando los movimientos de las tropas rusas, y el primero transmite esta información al US Pentagon. MDA, una compañía de tecnología espacial, dice que está trabajando con otras compañías para suministrar imágenes al gobierno ucraniano, mientras que BlackSky Technology, que rastrea señales de radio, está suministrando datos a “clientes anónimos”.
Aunque menos sofisticados que el tipo de satélites operados por actores a nivel estatal, algunos de estos ojos en el cielo operados de forma privada pueden ver a través de las nubes y funcionar de noche.
El US Pentagon no ha comentado el alcance de su uso de “servicios comerciales de imágenes satelitales”, pero estos servicios fueron financiados como parte de un paquete de ayuda militar a Ucrania anunciado el mes pasado. Además, Estados Unidos ha admitido abiertamente que comparte inteligencia militar con Ucrania y, según los informes, amplió el alcance de este intercambio el mes pasado.
El Wall Street Journal informó que “muchas compañías se negaron a ser específicas sobre cómo están ayudando a Ucrania”, por temor a que puedan ser vistas como participantes directos en el conflicto. Incluso la White House se abstuvo de compartir “información procesable” con Ucrania, “porque eso pasa la línea de hacernos participar en la guerra”, dijo el mes pasado el congresista Adam Smith (D-Washington), quien preside el House Armed Services Committee.
Sin embargo, algunas empresas son abiertas sobre su apoyo a Ucrania. Satellogic, una firma argentina que suministra datos a Ucrania, describió su papel como “ayudar a la causa” y se ha asociado con el Halifax International Security Forum para recaudar fondos para una mayor vigilancia satelital para Ucrania.
El gobierno ruso no ha comentado sobre Ucrania y el uso de satélites espías privados por parte de Occidente en Ucrania. Sin embargo, el Kremlin ha adoptado una visión firme sobre los envíos de armas occidentales a Ucrania, llamándolos “objetivos legítimos” y destruyendo varios de ellos con ataques con misiles.
Putin advierte respuesta fulminante si alguien interviene en Ucrania
El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, ha descrito la respuesta de Occidente a su operación en Ucrania como NATO “esencialmente llendo a la guerra contra Rusia a través de un mercenario y arma a ese mercenario”, mientras que el presidente Vladimir Putin ha advertido que cualquier interferencia externa en el conflicto que ponga en riesgo la seguridad de Rusia se enfrentará con una respuesta “rápida y fulminante”.
Fuente: RT