El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, el General de División Igor Konashenkov, emitió un comunicado oficial el Viernes por la mañana sobre el tiroteo y el incendio que se habían producido en la planta de energía nuclear Zaporozhskaya de Ucrania ese mismo día.
“Anoche, el régimen nacionalista de Kiev intentó llevar a cabo una horrible provocación en el área que rodea la estación”, anunció, alegando que las tropas rusas que patrullaban el territorio habían sido atacadas por un grupo de sabotaje ucraniano.
Según el portavoz, las fuerzas ucranianas habían atacado a soldados rusos alrededor de las 2 de la mañana, hora local, abriendo fuego intenso desde el centro de entrenamiento junto a la central eléctrica para “provocar un ataque de represalia en el edificio.”
La patrulla rusa había neutralizado los puntos de tiro del grupo, pero los saboteadores habían incendiado las instalaciones de entrenamiento mientras se replegaban, dijo Konashenkov. El incendio fue apagado por los bomberos del Servicio Estatal de Emergencia de Ucrania. “En el momento de la provocación, no había ningún miembro del personal en las instalaciones”, señaló Konashenkov.
En respuesta a la declaración del Ministerio de Defensa ruso, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky negó las afirmaciones de provocación y acusó a las fuerzas rusas de haber organizado el ataque.
El alcalde de la cercana ciudad de Energodar había informado originalmente de que el incendio había sido causado por el bombardeo ruso, y que el incendio había envuelto a la propia planta de energía, pero los servicios de emergencia desestimaron esta última afirmación.
Se informó el lunes que la instalación había sido capturada por las fuerzas rusas, y que el personal estaba manteniendo las operaciones en marcha y monitoreando los niveles de radiación. La International Atomic Energy Agency ha ofrecido garantías de que no ha habido cambios en esos niveles a raíz del incidente.
Rusia comenzó su ofensiva militar en Ucrania la semana pasada, alegando que su invasión tenía como objetivo “desmilitarizar” y “desnazificar” al gobierno de Ucrania y detener lo que llamó el “genocidio” en las dos regiones escindidas de Donetsk y Lugansk. Ucrania ha acusado a Rusia de una ofensiva no provocada, con Estados Unidos y sus aliados de NATO siguiendo su ejemplo e imponiendo severas sanciones económicas a Rusia.
Fuente: RT