El presidente ruso Vladimir Putin ha anunciado que ordenó a las fuerzas armadas de su país llevar a cabo una operación especial en la región de Donbass después de que los líderes de las repúblicas escindidas pidieran a Rusia asistencia militar en respuesta a lo que afirman es un aumento de la “agresión ucraniana”.”
La decisión se produce días después de que Rusia reconociera la independencia de las repúblicas escindidas de Donetsk y Lugansk en el Donbass, alegando que Ucrania no había cumplido con sus obligaciones en virtud de los acuerdos de Minsk alcanzados en 2014 y 2015 para resolver el conflicto entre los separatistas y el gobierno ucraniano.
Más tarde, los funcionarios autorizaron lo que describen como una “operación de mantenimiento de la paz” en la región. Durante meses, los líderes de las potencias occidentales habían predicho una incursión inminente, afirmando que Rusia ha reunido tropas cerca de su frontera con Ucrania y en la vecina Bielorrusia, donde Rusia ha llevado a cabo simulacros de guerra conjuntos en las últimas semanas.
Rusia negó planes para un ataque, sin embargo, y mantiene que sus acciones en el Donbass serán de naturaleza defensiva. Estados Unidos y sus socios europeos ya han impuesto sanciones a una serie de instituciones financieras, funcionarios y legisladores rusos tras el reconocimiento de los estados escindidos, prometiendo imponer más sanciones si Rusia “invadiera más” Ucrania.
Fuente: RT
