Temiendo la potencia de fuego nuclear y uno de los ejércitos más grandes del mundo, los paises extranjeros están dispuestos a evitar un conflicto directo con Rusia, dijo un alto funcionario de Moscú, advirtiendo que en vez de eso, están librando una guerra híbrida contra la sociedad rusa.
En una entrevista con la revista Armory of the Fatherland, Andrei Ilnitsky, asesor del Ministerio de Defensa de Rusia, dijo que Occidente era muy consciente del tamaño del arsenal de misiles de Rusia y sus tropas modernas y bien equipadas. Como resultado, el dijo, hay pocas o ninguna perspectiva de un verdadero conflicto armado entre esferas rivales en la próximo decada.
Sin embargo, el declaró: “todo esto ha llevado al surgimiento de un nuevo tipo de guerra”. En el pasado”, el objetivo de las guerras era destruir la mano de obra del enemigo, luego, en las guerras cibernéticas modernas, se trató de destruir la infraestructura del enemigo.”
Ahora, sin embargo, el advirtió que se ha desarrollado un nuevo tipo de guerra, y su “objetivo es destruir la autoconciencia, cambiando la base mental-civilizatoria de la sociedad enemiga. Yo llamaría a esto una guerra mental”, dijo Ilnitsky.
Mientras que las vidas perdidas y la propiedad dañada se pueden reponer con el tiempo, perder su sentido de quién es como país causa un daño duradero, dijo el asesor. Según él, las consecuencias de este tipo de asalto “no aparecen inmediatamente, sino solo después de una generación, momento en el que es imposible hacer nada”.
A finales del año pasado, el portavoz del Kremlin Dmitry Peskov dijo que la cultura rusa era fundamentalmente compatible con la civilización de Europa Occidental. “Sería estúpido tratar mal a Occidente”, dijo el Secretario de prensa. “Occidente tiene tecnología, y nosotros nos quedamos atrás en muchos aspectos. Tienen una cultura rica, y nosotros la compartimos. Nosotros también tenemos el más alto nivel de cultura. No puedes evitar amarlo.”Sin embargo, el agregó que el presidente Vladimir Putin frecuentemente encuentra “manifestaciones coloniales” de otros líderes en el escenario mundial.
En Diciembre, el Ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, dijo que se estaba librando una guerra híbrida por la reputación de la vacuna Covid-19 rusa Sputnik V. “Los paises occidentales están tratando no solo de politizar el tema humanitario de la lucha contra las infecciones por coronavirus”, dijo el diplomático, ” sino también de aprovechar la pandemia para castigar a los gobiernos que no les gustan.”
Lamentando la desaparición de las relaciones amistosas con los Estados Unidos, el Reino Unido y la Union Europea, Lavrov dijo que “seguimos abiertos al diálogo con los colegas occidentales. Por supuesto, en el entendimiento de que renunciarán a decirnos qué tenemos que hacer, junto con sus políticas de chantaje y ultimátum.”
Sin embargo, a principios de año, Jens Stoltenberg, el Secretario General del bloque militar NATO, hizo sonar una alarma sobre las “acciones agresivas” de Rusia, y pidió a los Estados miembros que inyectara efectivo a sus fuerzas armadas para evitar la supuesta amenaza del Este. En lugar de socavar la cultura rusa, Stoltenberg argumentó que “nuestras democracias, nuestros valores y el ‘orden basado en reglas’ están siendo desafiados.”
Fuente: RT