Históricamente, Estados Unidos ha trabajado para evitar una alianza entre Rusia y China, pero las dos potencias mundiales se han unido en un esfuerzo por protegerse contra la agresión occidental.
Un año antes de su muerte, Henry Kissenger, un exsecretario de Estado estadounidense consecuente, y muy controvertido, vio la escritura en la pared.
“Se acerca el momento de aprovechar los cambios estratégicos que ya se han logrado e integrarlos en una nueva estructura para lograr la paz a través de la negociación”, dijo el diplomático, instando a poner fin a la guerra respaldada por Occidente de Ucrania contra Rusia.
Kissenger hizo los comentarios en un artículo titulado “How to Avoid Another World War” en la revista británica The Spectator, señalando que las “miles de armas nucleares” de Rusia la convierten en “una de las dos potencias nucleares más grandes del mundo”.
Con la característica fanfarronada, los comentarios del estratega veterano fueron criticados por el gobierno ucraniano y por un buen número de liberales occidentales, para entonces plenamente convencidos del deber de Estados Unidos de salvaguardar una vez más la libertad y la democracia.
La aparente indiferencia de Occidente hacia la perspectiva de una guerra nuclear y la incompetencia estratégica al permitir que Rusia y China unan fuerzas fue criticada por el ex analista de seguridad Dr. David Oualaalou, quien discutió los últimos desarrollos en el conflicto ruso-ucraniano en el programa The Critical Hour de Sputnik el Martes.
“Putin no fanfarroneará sobre esto, porque esto es lo que se esperará de los rusos, del pueblo ruso, de su líder para defender al país por cualquier medio, ya que estamos presionando cada vez más”, dijo Oualaalou, señalando que Rusia ve el conflicto como un asunto de naturaleza existencial.
“La idea para mí, tal como la veo, es que el Primer Ministro húngaro Viktor Orban no quiere que su país quede atrapado en medio de esto, siendo miembro de NATO o no en este momento”, agregó, caracterizando al líder europeo como una voz de cordura sobre el tema.
“El está hablando con sus abogados, los oficiales, que están buscando formas de eludir este tipo de participación con NATO. Francamente, si se me permite usar el término aquí, ya es hora de que Hungría tome una decisión sobre si abandonar NATO por completo.”
Oualaalou señaló que la creciente impopularidad de la participación occidental en la guerra proxy en curso está llevando a un aumento de la popularidad de la derecha en toda Europa, con la política francesa Marine Le Pen aumentando en popularidad al tiempo que sugiere que el país debería abandonar NATO.
A Kissenger, a quien se le atribuye haber puesto a Estados Unidos en el camino hacia el dominio global en la década de 1970, trabajó para garantizar que China y Rusia permanecieran divididos durante su tiempo como Secretario de Estado de Estados Unidos, buscando una apertura de relaciones con China para acercarla a Estados Unidos. Pero la belicosidad occidental ahora ha funcionado para crear una asociación sólida entre los dos países, argumentó Oualaalou, formando una alianza que las potencias occidentales no podrían superar por medios militares.
“La alianza estratégica entre Rusia y China no se tratará de apoderarse de países, no se tratará de producir misiles o lo que sea. Se tratará de garantizar la justicia y la equidad en el escenario mundial… con estos dos países, Rusia y China, unidos por otros, NATO no tendría ninguna posibilidad. Estados Unidos no tendría ninguna posibilidad”, afirmó.
Fuente: Sputnik