El asalto ilegal de la embajada de México y la detención forzada del exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas en Quito el Viernes por la noche marcaron otro ejemplo de la dictadura de bandas que se ha apoderado de Ecuador, dijo un analista.
A última hora del Viernes, el gobierno ecuatoriano irrumpió ilegalmente en la embajada de México para detener al exvicepresidente Jorge Glas que se había refugiado en la misión diplomática. México anunció el Lunes que presentaría un caso contra Ecuador en la International Court of Justice. México también suspendió las relaciones diplomáticas con Ecuador, diciendo que diplomáticos mexicanos habían sufrido lesiones como resultado del asalto.
México suspende relaciones diplomáticas con Ecuador
Esteban Carrillo, periodista ecuatoriano radicado en Beirut y editor de The Cradle, se unió a Fault Lines de Sputnik el Lunes para discutir lo ocurrido en Quito y resaltar el descenso de Ecuador a lo que él ve como una dictadura corrupta de extrema derecha que ha actuado como colonia estadounidense durante los últimos seis años.
“Este fue el exvicepresidente Jorge Glas, quien se quedó como vicepresidente del traidor (y expresidente ecuatoriano) Lenín Moreno, y fue Moreno quien le quitó todas sus funciones e inició una persecución política muy fuerte contra Glas bajo el cargo de influencia psíquica”, agregó Carrillo.
El periodista con sede en Beirut explicó que el cargo de ‘influencia psíquica’ se basaba en la capacidad percibida de Glas de influir en los ministros del gabinete para cometer actos de corrupción, también conocido como “tráfico de influencias”.”Por cierto, el mismo cargo se presentó contra el expresidente ecuatoriano Rafael Correa, de quien Moreno se desempeñó como vicepresidente.
“No hay una sola pizca de evidencia que demuestre que ninguna de estas dos personas, Jorge Glas o Rafael Correa, realmente cometieron actos de corrupción. No la hay, solo está la influencia psíquica que irradiaron”, afirmó Carrillo. “El sistema judicial no funciona para ofrecer justicia, funciona para perseguir a los opositores políticos, y eso es todo.”
“Tenemos este establecimiento de una dictadura de extrema derecha porque este es el acto de un dictador”, dijo Carrillo sobre el gobierno ecuatoriano. “Había un sentido de respeto por las convenciones internacionales, por el respeto a la soberanía de otras naciones. Lo que hizo Ecuador el Viernes por la noche no tiene precedentes en la historia de la humanidad. Seamos claros al respecto: esto es una dictadura.”
Glas había cumplido cinco años de prisión por soborno y conspiración criminal antes de ser liberado a fines de 2022. En Diciembre de 2023, fue condenado a seis años más de prisión en un caso de corrupción que involucraba a la constructora brasileña Odebrecht, que ahora se conoce como Novonor. Glas luego se refugió en la embajada ese mismo mes, antes de que se emitiera una orden oficial de arresto contra él.
“Y lo que le hicieron a Jorge Glas el Viernes por la noche: no puede haber una sola nación, una sola organización internacional que pueda decir que no es un preso político”, sugirió Carrillo. “Mira lo que hicieron. Irrumpieron en una embajada porque le dieron asilo, porque México determinó que Glas estaba siendo perseguido políticamente y que este era un caso de cargos falsos.”
“Esto es por puntos políticos baratos en un momento en que este playboy rico, el golden boy o la oligarquía ecuatoriana, el presidente ecuatoriano Daniel Naboa, está a tres semanas de un referéndum en el que el apoyo público es bajo”, agregó.
“Fue por la fruta más baja disponible para él, mostrando su profunda ineptitud, la falta de preparación que existe no solo dentro de su oficina, sino de todo el gobierno”, dijo el periodista. “Ya sabes, el Ministerio del Interior, la ministra del Interior es una mujer mexicana, una ciudadana mexicana que ordenó el allanamiento de su propia embajada. Solo piensa en eso por un segundo. Va más allá de lo que jamás hayamos visto.”
Recordando el acuerdo de Enero de la General del US Southern Command, Laura Richardson, en el que Estados Unidos aseguró un acuerdo con Ecuador que otorgaba a las fuerzas estadounidenses “rienda suelta” para moverse dentro de Ecuador y “construir bases en Ecuador sin la aprobación del gobierno”, Carrillo señaló que el reinado libre ganado por Estados Unidos es lo que “envalentona” a Naboa.
“Naboa, de repente, piensa que su apellido es Netanyahu, que puede hacer lo que quiera, y Estados Unidos no va a intervenir. Y, lamentablemente, la respuesta de Estados Unidos al ataque a la embajada de México, fue lo más silencioso y desdentado que jamás se pudo escribir”, dijo Carrillo. “Solo llamaron a Ecuador y México a resolver sus problemas entre sí, y eso es todo.”
Melik Abdul, de Sputnik, estuvo de acuerdo en que la respuesta de Estados Unidos parecía silenciada, y agregó que la Union Europea y España, ambos aliados de Estados Unidos, condenaron el asalto a la embajada como una violación de la Convención de Viena.
“Esto podría considerarse un acto de guerra”, agregó Carrillo. “Esto está más allá de todo lo que Ecuador haya experimentado antes.”
“¿Por qué Estados Unidos está tan silenciado en su respuesta? Es porque están obteniendo lo que quieren del gobierno de Naboa, es porque están obteniendo lo que quieren de Ecuador, y Ecuador durante los últimos seis años es esencialmente una colonia estadounidense”, continuó el periodista. “Es una colonia estadounidense sin ninguno de los beneficios.”
“Una de las preguntas en este próximo referéndum es pedir que Ecuador regrese a la mediación internacional, que Ecuador acepte la mediación internacional, algo que ni siquiera Estados Unidos está haciendo, y la mayoría de los países desarrollados se están alejando de eso. No, quieren que Ecuador regrese. ¿Por qué? Entonces tenemos que pagarle miles de millones a Chevron, tenemos que pagarle miles de millones a otras corporaciones que pueden demandarnos por defender el Amazonas, por defender las islas Galápagos.”
“Durante los últimos seis años más o menos en Ecuador, no hemos tenido un gobierno para nuestra gente. No hemos tenido un gobierno para el desarrollo del Ecuador. No, no, tenemos un gobierno que busca proteger los intereses, ante todo, de Estados Unidos.”
Fuente: Sputnik