Se proyecta una gama más amplia de sanciones contra Rusia para profundizar las relaciones comerciales no denominadas en dólares entre Rusia y China, según el ex negociador comercial estadounidense y funcionario del Banco Mundial con experiencia en China y Rusia, Harry Broadman.
“El problema con las sanciones, especialmente con un productor de petróleo, que es lo que es Rusia, será la fuga en el sistema”, dijo Broadman, citado por Reuters.
“China puede decir: ‘Vamos a comprar petróleo en el mercado abierto y si es petróleo ruso, que así sea.’”
Desde que se introdujeron medidas punitivas menores en 2014 después de la reunificación de la península de Crimea con Rusia, China se ha convertido en el mayor destino de exportación de Rusia.
Estados Unidos y las naciones occidentales están a punto de imponer una gama más amplia de sanciones económicas contra Rusia si el Kremlin intensifica el conflicto actual en las repúblicas escindidas de Donetsk y Lugansk. El Kremlin reconoció la independencia de ambas a principios de esta semana.
Por el decreto que siguio, Putin ordenó al ejército ruso “garantizar la paz” en las repúblicas recientemente reconocidas, que anteriormente se consideraban parte de Ucrania.
El reconocimiento llevó a la White House a desatar el “primer grupo” de nuevas sanciones contra Rusia. El Martes, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, firmó una orden ejecutiva que supuestamente apunta a “la élite y sus familiares”. Biden también afirmó que el proyecto del gasoducto Nord Stream 2 “no avanzará”, y que las sanciones ayudarían a “cortar al gobierno de Rusia del financiamiento occidental” al prohibir el comercio de su deuda soberana.
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Según la orden ejecutiva de Biden, cualquier institución del sector de servicios financieros ruso es objeto de nuevas sanciones, afirmaron funcionarios estadounidenses, diciendo que más del 80% de las transacciones diarias de divisas de Rusia y la mitad de su comercio se liquidan en dólares estadounidenses. Biden se comprometió a “tomar medidas enérgicas para garantizar que el dolor de nuestras sanciones se dirija a la economía rusa, no a la nuestra.”
Sin embargo, varios expertos dicen que eliminar la economía de 1.5 billones de dólares del comercio mundial no es una tarea fácil, ya que Rusia se encuentra entre los principales exportadores mundiales de petróleo, gas natural, cobre, aluminio, paladio y otros productos básicos vitales.
Los anuncios de Biden enviaron los precios del petróleo a niveles nunca vistos desde 2014.
Rusia representó casi el 2% del comercio mundial en 2020, frente al 2.8% de 2013, según datos del Banco Mundial. El PIB del país para 2020 ocupó el puesto 11 a nivel mundial, entre Brasil y Corea del Sur.
Según la base de datos World International Trade Solution del Banco Mundial, la dependencia de Rusia del comercio ha disminuido en los últimos 20 años. Mientras tanto, sus destinos de exportación también han cambiado. Holanda era el principal destino de exportación hace una década, debido al comercio de petróleo, pero ha sido reemplazado por China. Las compras de Alemania y Gran Bretaña a Rusia se han mantenido en gran medida estables, mientras que las importaciones de Bielorrusia han estado creciendo.
China sigue siendo el proveedor número uno de importaciones de Rusia, con teléfonos móviles, computadoras, equipo de telecomunicaciones, juguetes, textiles, ropa y piezas de electrónica entre las principales categorías. Su participación en las importaciones rusas ha aumentado desde 2014, mientras que las procedentes de Alemania han disminuido notablemente.
Fuente: RT
