Según los informes, China rechazó la oferta de Estados Unidos de nuevas conversaciones comerciales en medio del alboroto mediático sobre la presunta aprobación del presidente Donald Trump de ampliar tarifas. En vez de sentarse a negociar, China podría dejar de suministrar algunos materiales vitales a las empresas estadounidenses.
Al parecer, China se muestra renuente a entablar negociaciones comerciales con los Estados Unidos en las circunstancias actuales, ya que dijo que no negociaría bajo presión, aunque no abandonó por completo las negociaciones, informó el Wall Street Journal citando a funcionarios chinos. También dijo que los últimos movimientos de la administración Trump podrían poner en peligro las posibles conversaciones comerciales con China, que los propios funcionarios estadounidenses habían buscado.
“China nunca dijo que no quiere negociar con Estados Unidos”, dijo el domingo Yang Weimin, ex asesor principal de política económica y exterior del presidente Xi Jinping, citado por el WSJ. Añadió, sin embargo, que Estados Unidos primero debe “mostrar sinceridad” en su deseo de resolver la disputa comercial. “China no va a negociar con un arma apuntando a su cabeza”, señaló el funcionario.
El destino de las conversaciones, que podría tener lugar más adelante en septiembre, aún no está claro, dijo otro funcionario. “Hay mucha incertidumbre en este momento”, dijo el funcionario no identificado a los medios, y agregó que “si se aplican más tarifas, la parte china podría elegir no ir”.
China ya ha prometido responder con contra sanciones espejo si Estados Unidos la golpea con más impuestos a la importación. Sin embargo, ahora también se informa que China podría limitar las ventas de materiales, equipos y repuestos a compañías estadounidenses como parte de medidas de represalia. China puede adoptar “restricciones a la exportación” además de aranceles, dijo un ex ministro de Finanzas chino, Lou Jiwei, en una reunión de académicos y ejecutivos de empresas estadounidenses y chinos. Las restricciones podrían afectar particularmente a Apple, que ensambla sus iPhones en China.
Estados Unidos fracasa, Trump culpa a China
El viernes, según los informes, Trump autorizó aranceles adicionales sobre productos chinos con un valor de aproximadamente $ 200 mil millones de dolares. El presidente de Estados Unidos ha amenazado repetidamente con hacerlo y dijo que las restricciones, que cubren casi todas las exportaciones chinas a los Estados Unidos, se impondrán pronto, pero no ofreció una fecha. Trump tampoco hizo anuncios oficiales el viernes. China, mientras tanto, prometió imponer tarifas acordes a $ 60 mil millones en bienes estadounidenses y tomar otras medidas no especificadas en respuesta.
Estados Unidos ya golpeó a China con aranceles del 25 por ciento sobre productos con valor de $ 50 mil millones, lo que provocó que China respondiera con sanciones espejo. La guerra comercial ha sido provocada por Trump por lo que segun el ve como un desequilibrio comercial, diciendo que el déficit comercial lastima a Estados Unidos.
Las autoridades estadounidenses y chinas ya sostuvieron polémicas conversaciones comerciales a fines de agosto en un intento por resolver las diferencias existentes. Una delegación china encabezada por el viceministro de Comercio, Wang Shouwen, viajó a Estados Unidos para negociaciones de dos días. El Treasury Undersecretary for International Affairs, David Malpass, representó a los Estados Unidos. Sin embargo, las conversaciones no arrojaron ningún resultado práctico.
El US Treasury Secretary, Steven Mnuchin, envió una invitación al viceprimer ministro de China, Liu He, en un intento por reactivar las conversaciones a principios de la semana pasada, pero el destino de las potenciales negociaciones quedó en el limbo debido a las medidas de Estados Unidos.
Fuente: RT
