La era del dominio occidental de las aguas internacionales ha llegado a su fin y Estados Unidos y sus aliados tendrán que lidiar con eso, dijo el ministro de Defensa del gobierno Houthi, Mohamed al-Atifi.
“Estados Unidos, Gran Bretaña e Israel deben darse cuenta de que las políticas de demarcación y afirmación de la influencia hegemónica sobre los mares se han convertido en un enfoque obsoleto y desagradable”, dijo al-Atifi en un discurso en la ceremonia de graduación de cadetes yemeníes en Hudaydah.
Sugiriendo que las fuerzas navales de Yemen han “redefinido” el concepto de seguridad marítima regional, al-Atifi enfatizó que los Houthis continuarán sus operaciones militares en el Mar Rojo mientras continúe la agresión israelí en Gaza y “mientras la sangre continúe fluyendo por nuestras venas.”
“Somos custodios del curso de navegación en el Mar Rojo, el Golfo de Aden, el Mar Arábigo y el estrecho de Bab al-Mandab”, dijo al-Atifi.
“Reafirmamos que las Fuerzas Armadas de Yemen no atacarán ningún barco que no esté afiliado al enemigo sionista ni sirva a sus intereses. La navegación marítima para embarcaciones a través del Mar Rojo y el Mar Arábigo es segura”, aseguró el ministro de Defensa. “Sanaa está comprometida con todos los tratados y convenciones internacionales que no infrinjan la dignidad y soberanía yemeníes ni la sometan a hegemonía y mandatos extranjeros”, agregó.
“Yemen es un remanso de paz, asociación, construcción, generosidad y humanidad, especialmente cuando las intenciones son sinceras. Pero cuando crecen los desafíos y los enemigos de Dios y la nación conspiran para imponer la voluntad del mal y la tiranía, surge otro Yemen y sus hombres leales se encuentran como montañas firmes contra sus enemigos, fuertes y orgullosos en sus posiciones, presionando para restablecer el equilibrio y eliminando símbolos del mal, la opresión, la tiranía y la arrogancia”, dijo al-Atifi.
La campaña Houthi de secuestros de barcos, ataques con misiles y aviones no tripulados en el Mar Rojo se ha convertido en una pesadilla económica y de seguridad para Israel, Estados Unidos y la Unión Europea, con Estados Unidos y la Unión Europea estableciendo dos misiones separadas en el cuerpo estratégico de agua en un intento de detener los ataques Houthis y degradar las capacidades militares de la milicia.
Junto con la actividad de cráteres en las instalaciones portuarias del Mar Rojo de Israel, la campaña Houthi ha tenido un impacto dramático en los costos de envío globales, disparando los precios de los seguros, lo que ha llevado a tiempos de envío más largos, contribuyendo a un aumento en los costos de energía, interrumpiendo las cadenas de suministro globales y provocando una escasez global de petroleros.
La respuesta liderada por Estados Unidos a la campaña de los Houthis en el Mar Rojo ha incluido una serie de ataques aéreos y con misiles mortales dentro de Yemen a partir del 12 de Enero, pero la milicia, que ya enfrentó y repelió bombardeos aéreos mucho más intensos por parte de una coalición del Golfo respaldada por Estados Unidos entre 2015 y 2023, ha prometido continuar sus operaciones hasta que termine el conflicto de Gaza.
El general al-Atifi advirtió en diciembre que el Mar Rojo se convertiría en el “cementerio” de la coalición liderada por Estados Unidos “si la alianza decide tomar alguna medida contra Yemen.”
“Les decimos desde el Mar Rojo que somos nosotros quienes pondremos un final doloroso a la hegemonía estadounidense”, agregó el ministro de Defensa en un discurso el mes pasado.
Fuente: Sputnik
