Bombarderos estadounidenses atacaron nuevamente las instalaciones Houthi en Yemen el Lunes, dijo el US Central Command (CENTCOM). Esta es la segunda vez que bombarderos británicos participan en la operación, ahora denominada ‘Poseidón Archer’.
Aviones de la Royal Air Force (RAF) con base en Chipre habían estado involucrados en el ataque del 11 de Enero, mientras que Estados Unidos utilizó misiles de crucero y aviones del portaaviones USS Eisenhower. Desde entonces, Estados Unidos ha llevado a cabo seis ataques más por su cuenta, supuestamente dirigidos contra misiles Houthis mientras se preparaban para su lanzamiento.
Las fuerzas estadounidenses y británicas “llevaron a cabo ataques contra 8 objetivos Houthis” en Yemen justo antes de la medianoche del Lunes, dijo CENTCOM en X (anteriormente Twitter). “Los objetivos incluían sistemas de misiles y lanzadores, sistemas de defensa aérea, radares e instalaciones de almacenamiento de armas profundamente enterradas.”
Según CENTCOM, los ataques se llevaron a cabo “junto con las Fuerzas Armadas del Reino Unido y con el apoyo de Australia, Bahréin, Canadá y Holanda.”
Aunque todos los países nombrados se han comprometido a participar en la ‘Operation Prosperity Guardian’ liderada por Estados Unidos, destinada a garantizar la seguridad del transporte marítimo internacional, el ejército estadounidense insistió en que los ataques eran “separados y distintos de la operación multinacional de libertad de navegación”.
Más temprano el Lunes, CNN informó que el US Pentagon llamó a la misión de ataque ‘Operation Neptune Archer’, lo que sugiere un compromiso estadounidense a largo plazo de bombardear a los Houthis. El Washington Post informó durante el fin de semana que el objetivo de Estados Unidos era “degradar y destruir sus capacidades”, citando a funcionarios que querían permanecer en el anonimato.
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El CENTCOM ha acusado a los Houthis de “ataques imprudentes e ilegales contra barcos estadounidenses y británicos, así como contra el transporte comercial internacional en el Mar Rojo, el estrecho de Bab Al-Mandeb y el Golfo de Adén.”
El ataque se produce después de la llamada telefónica entre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el Primer Ministro británico, Rishi Sunak, en la que discutieron la situación en Yemen.
Los Houthis anunciaron a fines de Octubre que atacarían todos los envíos vinculados a Israel en el Mar Rojo hasta que se levante el bloqueo de Gaza, y desde entonces han atacado a varios buques mercantes. Después de los ataques del 11 de Enero, ampliaron la lista de objetivos a barcos británicos y estadounidenses también.
Los ataques Houthi han impactado a la industria naviera mundial más que la pandemia de Covid-19, dijo la semana pasada la firma de asesoría marítima Sea-Intelligence. Aproximadamente el 15% del comercio marítimo mundial pasa por la región.
Ante el aumento de las primas de seguro, las principales compañías occidentales como Maersk, MSC, CMA CGM y Hapag-Lloyd han optado por desviar sus cargas por África, lo que requiere más tiempo y combustible.
Fuente: RT
