Aviones rusos atacaron objetivos militares en la zona desmilitarizada de Idlib, desde la cual los militantes sirios lanzaron un ataque con “gas venenoso” contra civiles en la ciudad de Alepo, anunció Rusia.
El ataque aéreo estuvo dirigido especialmente a los puestos de artillería de los militantes, según el portavoz del Ministerio de Defensa, el mayor general Igor Konashenkov.
Todos los objetivos fueron eliminados como consecuencia del ataque aéreo ruso.
Según reportes, los militantes no planearon detenerse con un asalto. Los datos de inteligencia mostraron que se planearon más ataques de este tipo, reveló Konashenkov.
Los ataques aéreos de la fuerza aérea rusa ocurrieron menos de un día después de que varias áreas residenciales de Alepo fueron atacadas con municiones llenas con “gas venenoso” lanzadas por los militantes sirios. Al menos 46 personas fueron tratadas por síntomas de envenenamiento por cloro, confirmó mas temprano el Ministerio de Defensa ruso.
La agencia de noticias local, SANA, reporto un mayor número de lesionados, diciendo que hasta 107 personas, incluyendo mujeres y niños, fueron víctimas del ataque de los militantes.
Acusando a paises extranjeros no identificados, el gobierno sirio alegó que la entrega de agentes químicos a grupos terroristas por parte de estos países ocasionó la tragedia. Los casos anteriores en los que se hicieron denuncias de un ataque tóxico por parte de los rebeldes sirios, llevaron rápidamente a una protesta de la comunidad internacional, que se apresuró a castigar a Siria con bombardeos.
La reacción de Occidente al ataque del sábado por la noche ha sido bastante moderada hasta ahora. Francia es el único pais que ha declarado su posicion sobre el asalto, diciendo que el caso debería ser abordado por el international chemical watchdog, la OPCW. Admitiendo que no tiene suficiente información en este momento, el presidente francés Emmanuel Macron prometió plantear el tema en conversaciones con sus “socios” dentro de la Union Europea y más allá. La reacción de Estados Unidos, Reino Unido y Francia al ataque de los militantes con agentes tóxicos a civiles en Aleppo es notablemente contrastante con su decisión de bombardear objetivos militares del gobierno sirio después de denuncias de los “rebeldes” no confirmadas de ataques con armas quimicas por parte del gobierno sirio.
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Mientras tanto, el gobierno sirio ha pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que condene inmediatamente los “crímenes terroristas” y que “tome … medidas” contra los paises que apoyan el terrorismo.
Fuente: RT
