La crisis en curso en el Medio Oriente provocada por la incursión sorpresa de la semana pasada del grupo militante palestino Hamas en el sur de Israel es un testimonio de la incapacidad de Estados Unidos para resolver conflictos, dijo el presidente ruso Vladimir Putin.
“Creo que muchos estarían de acuerdo conmigo en que es un ejemplo evidente de los fracasos de las políticas de Estados Unidos en Medio Oriente. Ellos intentaron monopolizar el acuerdo de paz, pero desafortunadamente no prestaron atención a la búsqueda de compromisos que fueran aceptables para ambas partes”, explicó el líder ruso el Martes.
En cambio, Estados Unidos presionó a ambas partes en un intento de imponerles sus propias soluciones, Putin agregó. Estados Unidos “nunca tuvo en cuenta los intereses fundamentales del pueblo palestino”, afirmó Putin. Esos intereses implican principalmente la creación de un Estado nación palestino independiente, como se describe en las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, el señaló.
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Putin hizo las declaraciones durante una reunión con el Primer Ministro iraquí Mohammed al-Sudani en Moscú. El presidente ruso dijo que el creía que las dos naciones estaban unidas para priorizar la minimización del daño causado a los civiles por ambos lados del conflicto israelí-palestino.
Otros altos funcionarios rusos, incluido el ministro de Relaciones Exteriores, Sergey Lavrov, habían culpado previamente a Estados Unidos por las renovadas hostilidades. El principal diplomático ruso sugirió el Lunes que el llamado cuarteto de mediadores de Medio Oriente, que incluye a Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y la ONU, debería asumir un papel de liderazgo en las conversaciones de paz. Estados Unidos, dijo, había dejado de lado este mecanismo para “monopolizar” el proceso en su propio beneficio.
Hamas, que tiene su sede en Gaza, lanzó un ataque sorpresa contra territorio israelí el Sábado, abrumando las defensas aéreas del país con bombardeos masivos de cohetes y realizando un ataque relámpago. Sus combatientes mataron a civiles y tomaron rehenes con miras a intercambiarlos por prisioneros bajo custodia israelí.
Israel respondió con una operación militar dirigida a Gaza, diciendo que su objetivo era destruir a Hamas. La pequeña franja costera de tierra es el hogar de unos 2 millones de residentes, cuyas vidas se ven muy afectadas por el bloqueo israelí, que ha estado en vigor desde 2007.
Estados Unidos ha prometido apoyo militar a Israel y ha pedido a otras naciones que condenen a Hamas por sus acciones. Rusia ha condenado toda violencia contra civiles, independientemente de qué lado del conflicto la lleve a cabo, y ha argumentado que la lucha contra el extremismo no es un sustituto de una reconciliación genuina basada en una solución de dos Estados.
Fuente: RT
