A principios de este mes, el ministro de Energía y Recursos Naturales de Turquía, Fatih Donmez, reveló planes para llevar a cabo una mayor exploración de petróleo y gas en el mar Mediterráneo oriental después de firmar un memorando de entendimiento con el Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA) de Libia el cual es respaldado por la ONU.
Channel 13 News de Israel informó el sábado, citando a un alto funcionario israelí no identificado, que los barcos de la Armada turca persiguieron a los barcos israelíes fuera de las aguas sobre las cuales Ankara reclama jurisdicción.
Según el funcionario, los oficiales navales turcos contactaron a la tripulación del buque israelí y le ordenaron que abandonara el área.
Según los informes, el barco israelí estaba realizando trabajos de investigación en coordinación con el gobierno chipriota dentro de un acuerdo multilateral para el Eastern Mediterranean Pipeline Project que ha sido aprobado por la Unión Europea.
Según el funcionario, el incidente impactó negativamente el trabajo en el proyecto.
Chipre está dividido desde 1974, cuando las tropas turcas desembarcaron en la isla alegando que tenían que proteger a los turcos locales de la comunidad griega. Casi una década después, se declaró la República Turca del Norte de Chipre, pero actualmente solo Turquía la reconoce.
La disputa entre la República de Chipre y Turquía se intensificó en 2011 cuando se descubrieron los primeros depósitos de gas en la costa de la isla.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía ha dejado en claro que Turquía continuará realizando perforaciones de gas en la zona económica exclusiva (ZEE) de Chipre, mientras que Chipre ha instado a Turquía a que deje de “violar abiertamente el derecho internacional” y no tome en cuenta los llamados de la Unión Europea y la comunidad internacional. para detener sus “actividades ilegales”.
El 27 de noviembre, Turquía y el GNA firmaron dos acuerdos, uno de los cuales determina una parte de la jurisdicción marítima de Turquía en el Mediterráneo oriental. La nueva frontera marítima establecida por el acuerdo atraviesa una zona en el Mediterráneo que Grecia y Chipre reclaman como suya.
Fuente: Sputnik