Los funcionarios de aduanas chinos han rechazado la entrada a 469 toneladas de desechos sólidos de Estados Unidos, cuya importación ha sido prohibida recientemente, y han devuelto la basura a Estados Unidos, informó la agencia de noticias Xinhua.
Los inspectores en Hangzhou, la capital de la provincia de Zhejiang, en el este de China, encontraron que el envío consistía en papel de desecho mezclado con partes de desechos de metal y botellas no retornables usadas, según la agencia. Los embarques de desechos sólidos a China están prohibidos por el gobierno china.
Las autoridades aduaneras chinas exigieron que la basura sea devuelta a Estados Unidos lo antes posible.
A finales de 2017, China prohibió las importaciones de 24 tipos de residuos sólidos en el país como parte de la lucha contra la contaminación ambiental. Anteriormente, China era un importador mundial de basura, incluidos los Estados Unidos, que era uno de los proveedores (de basura) más importantes.
China ha sido durante mucho tiempo la papelera de reciclaje del mundo, procesando mas del 50 por ciento de las exportaciones mundiales de desechos plásticos, de papel y metalicos en 2016. Ese año, Estados Unidos pagó a China $ 5,2 mil millones de doláres para reciclar 16 millones de toneladas de desechos estadounidenses.
“Grandes cantidades de desechos sucios o incluso desechos peligrosos se mezclan en los residuos sólidos que se usan como materia prima en los procesos de reciclado”, dijeron las autoridades chinas, explicando su decisión ante la World Trade Organization. “Esto contaminó seriamente el medio ambiente de China”.
Cuando la economía china era más pequeña, era menos costoso para el país – por su mano de obra barata – reciclar que fabricar esos materiales desde cero. Sin embargo, a medida que la economía china crece, procesar la basura se ha vuelto cada vez menos rentable además de la contaminación que se genera.
Se han recibido informes de que tras la prohibición de las importaciones de desechos, los países desarrollados y los Estados Unidos en particular han tenido problemas para deshacerse de su basura. Steve Frank, de Pioneer Recycling en Portland, Oregon, dijo a NPR que “el resto del mundo no puede compensar esa capacidad para procesar su basura”.
Fuente: RT