Un operativo republicano, conocido como el Trump family “fixer”, parece haber admitido en una llamada grabada que el nuevo jefe de espionaje estadounidense actuó de acuerdo con las órdenes del presidente cuando supuestamente aseguró el arresto del editor de WikiLeaks, Julian Assange.
El contenido de la llamada entre el operativo del Partido Republicano Arthur Schwartz y la periodista Cassandra Fairbanks – que podría hechar abajo el juicio de extradición en el Reino Unido de Julian Assange – fue informado el martes por varios medios de comunicación estadounidenses citando al grupo de transparencia sin fines de lucro Property of the People. La grabación en sí fue publicada más tarde por Fairbanks en Twitter.
En la llamada, fechada en septiembre de 2019, Schwartz suplica a Fairbanks que eliminara un tweet del 10 de septiembre en el que dice que Richard Grenell, entonces el US envoy para Alemania, “fue quien arregló el acuerdo para el arresto de Julian Assange.”
Inicialmente, Fairbanks se negó a hacerlo, argumentando que su tweet se basó en un informe de ABC News de abril pasado alegando que Grenell jugó un papel decisivo en persuadir a Ecuador para que permitiera que la policía británica ingresara a su embajada de Londres, donde Assange pasó unos siete años bajo asilo político. El informe sugirió que Grenell prometió a Ecuador que Estados Unidos no buscaría la pena de muerte para el editor autoexiliado si daba el visto bueno para la detención.
Schwartz, sin embargo, insistió en que Fairbanks debia eliminar el tweet, acusándola de publicar “información clasificada.”
Sonando cada vez más frustrado con la falta de voluntad de Fairbank para eliminar el tweet , el operador de Trump dice que podría ir a la cárcel por la información que aparentemente había compartido con ella.
“El rol de Rick es clasificado … tu no puedes hacer eso … estás publicando cosas que son clasificadas, que nadie sabe, que no han sido reportadas… Sé lo que se ha informado, veo lo que estás twitteando, lo que estás twitteando no es lo que se informó. Alguien va a ir a la cárcel. Tienes que detener esto.”
Fairbanks le recordó que fue Assange quien fue encarcelado debido a su trabajo para exponer los crímenes de guerra de Estados Unidos, pero Schwartz solo repitió su solicitud. Al mismo tiempo, Schwartz parece confirmar que el propio Trump había ordenado la operación diplomática encubierta para atrapar a Assange, supuestamente orquestada por Grenell.
“Por favor. Te lo ruego … Ellos te miran, ellos ven que hablamos, eso es malo. Él (Grenell) está recibiendo órdenes del presidente. ¿De acuerdo? Entonces, ¿me vas a castigar porque recibió órdenes del presidente? Te lo ruego, te lo ruego, por favor.”
Fairbanks finalmente eliminó el tweet, pero dijo que archivó la publicación. Partidaria abierta de Assange, la periodista ha confirmado los informes de que la llamada grabada se incluirá en los materiales presentados por el equipo de defensa del editor como evidencia de que su persecución fue motivada políticamente desde el principio.
Una fuente al tanto de la estrategia del equipo de defensa de Assange le dijo a Politico que la llamada sería solo “una pieza del argumento”, parte de un mayor cumulo de pruebas que se darán a conocer en los tribunales el miércoles. Los materiales están destinados a demostrar que la solicitud de extradición de Assange se basó en un deseo de venganza, más que en cualquier base legal.
Schwartz mismo intentó desacreditar la bomba como un “nothingburger”, diciendo a la fuente que el “duda ampliamente” que habría dicho a la periodista algo substancial, describiéndola como “alguien en quien no confío.”
La audiencia de extradición comenzó en Woolwich Crown Court de Londres a principios de esta semana, con el juez Vanessa Baraitser listo para decidir si la solicitud de extradición de Estados Unidos es legítima bajo los términos de un tratado de 2003 entre el Reino Unido y los Estados Unidos.
El equipo legal de Assange insiste en que el caso de la fiscalía está lleno de “mentiras, mentiras y más mentiras” y que los presuntos delitos puestos en Assange – como poner en peligro a los militares estadounidenses – son falsos, ya que el editor hizo todo lo posible para proteger las fuentes. Assange enfrenta más de una docena de cargos de conspiración, algunos de ellos bajo la Espionage Act de la Primera Guerra Mundial, con una posible cadena perpetua si es extraditado y condenado.
Fuente: RT