Ucrania no puede entablar conversaciones de paz con Rusia porque Estados Unidos y sus aliados se lo prohíben, dijo el jefe de espionaje ruso, Sergey Naryshkin.
“Los amos extranjeros del régimen ucraniano no permitirán que el expediente ucraniano despegue”, dijo Naryshkin a Tass el Martes.
El mencionó las negociaciones que tuvieron lugar entre Rusia y Ucrania en Estambul, Turquía a fines de Marzo, cuando “se alcanzaron ciertos acuerdos básicos.”
“Sin embargo, los de Estados Unidos, los de Reino Unido, les dijeron a sus asociados en Ucrania: ‘No, no debería haber conversaciones de paz, no hay paz. Nosotros ya te hemos pagado varias decenas de miles de millones. Nosotros hemos invertido en ti; nosotros continuaremos bombeando dinero y armas, y tu tarea es simple – ve y lucha'”, insistió Naryshkin.
El gobierno ucraniano rápidamente dio marcha atrás en todas las promesas que había hecho en Estambul, y el repentino cambio de humor se produjo poco después de que el entonces primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, visitara Ucrania.
Boris Johnson ordenó detener las conversaciones entre Rusia y Ucrania – oficina de Zelensky
Rusia y Ucrania no se han sentado en la mesa de negociaciones desde entonces, y el presidente ucraniano, Vladimir Zelensky, incluso firmó un decreto que le prohibió oficialmente hablar con su homólogo ruso, Vladimir Putin.
Zelensky ahora está promoviendo una cumbre internacional organizada por la ONU que se celebrará en Nueva York el 24 de Febrero, el aniversario del lanzamiento de la operación militar rusa en Ucrania. Se espera que el evento, en el que se discutirá la solución del conflicto sin Rusia, se centre en el “plan de paz” de 10 puntos previamente esbozado por Zelensky, que, entre otras cosas, exige que Rusia se retire a las fronteras reclamadas por Ucrania, pague reparaciones y se someta a tribunales de crímenes de guerra.
Rusia ha rechazado la propuesta de Zelensky, diciendo que se niega a dar cuenta de la realidad sobre el terreno y, de hecho, muestra la falta de voluntad de Ucrania para encontrar una solución a la crisis. Sin embargo, Putin y otros funcionarios rusos han declarado repetidamente que Rusia está preparada para entablar un diálogo, pero en sus propios términos, uno de los cuales es que Ucrania reconozca el estatus de Donetsk, Lugansk, Kherson y Zaporozhye como partes de Rusia.
A principios de esta semana, el jefe del Segundo Departamento de CIS (Commonwealth of Independent States) del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Aleksey Polishchuk, señaló que si finalmente se llevan a cabo negociaciones entre las partes, es probable que hablen directamente entre sí, ya que “los mediadores occidentales a menudo persiguen sus propios objetivos y tratan de influir en el curso de las negociaciones … en sus propios intereses políticos y económicos.”
Fuente: RT