Emmanuel Macron ha prometido “atacar” a Siria si surge alguna evidencia de que se usaron armas químicas contra civiles. Sin embargo, agregó que las agencias de inteligencia francesas no tienen pruebas para respaldar tales acusaciones.
“En cuanto a las armas químicas, establezco una línea roja y reafirmo esa línea roja”, dijo Macron a los periodistas en París el martes. “Hoy, nuestras agencias, nuestras fuerzas armadas no han establecido que las armas químicas, como se establece en los tratados, se hayan utilizado contra la población civil”.
Si se encuentra alguna evidencia, Francia atacará los lugares donde los envíos de armas químicas “se originan”, Macron agregó. El presidente francés también recordó sus conversaciones telefónicas con el presidente ruso, Vladimir Putin, que tuvieron lugar el viernes pasado.
“Se lo he reiterado al presidente Putin, pidiéndole que deje muy claro al régimen sirio, que ha reafirmado que no usa armas químicas … pero los estamos vigilando”, afirmó Macron.
Mientras el presidente Macron ha estado insistiendo sobre “represalias inmediatas” por el uso de armas químicas en Siria desde que asumió el cargo, Francia no ha emprendido ninguna acción debido a “la falta de certeza sobre lo que sucedió en Siria”, dijo el viernes la ministra francesa de Defensa, Florence Parly.
El país prefiere evitar cualquier movimiento impulsivo y no actúar sin tener información confiable sobre los supuestos ataques químicos.
“Tenemos algunas indicaciones de posible uso de cloro (en Siria), pero no tenemos una confirmación absoluta”, dijo el ministro. “Entonces, nosotros junto con los demás, estamos trabajando para tratar de confirmar esto, ya que claramente tenemos que aclarar los hechos”.
Sin embargo, el ministro de Relaciones Exteriores francés acusó al gobierno sirio y afirmó la semana pasada que “todos los indicios nos muestran que ahora mismo el régimen usa el cloro en Siria”.
Las denuncias más recientes de un posible ataque químico en Siria surgieron el mes pasado. Las acusaciones fueron transmitidas por fuentes controvertidas, incluida la conocida ONG White Helmets y el Syrian Observatory for Human Rights (SOHR) con sede en el Reino Unido. Las acusaciones no han sido verificadas independientemente hasta el momento.
El incidente reportado coincidió con una conferencia celebrada el 23 de enero en París, donde Estados Unidos y otras 20 naciones crearon la ‘International Partnership against Impunity for the Use of Chemical Weapons’. El Secretario de Estado de los Estados Unidos Rex Tillerson culpó rápidamente al gobierno sirio e incluso a Rusia (sin ofrecer pruebas) por el “ataque”, a pesar de la falta de información sólida al respecto, afirmando que Rusia finalmente es responsable de cualquier incidente relacionado con el uso de armas químicas, independientemente de quién lo haya realizado.
Rusia, a su vez, condenó la reunión como un ejemplo de “enfoque cuasi-colectivo” y un intento de sabotear el credito de los organismos internacionales ya existentes en la plataforma de la ONU, a saber, la Organization for the Prohibition of Chemical Weapons.
Las nuevas declaraciones de Macron se produjeron en medio de una advertencia del Russian Center for Reconciliation in Syria sobre el posible montaje simulado de un”ataque” químico en el país. El Centro recibió un aviso de un residente de Serakab en la gobernatura de Idlib en Siria. La fuente afirmó que el grupo terrorista Al-Nusra Front (actualmente conocido como Tahrir Al-Sham) llevó unos 20 botes de cloro junto con equipo de protección personal a la aldea, mientras que los White Helmets realizaron simulacros de “primeros auxilios” con “residentes locales” que supuestamente sufriendo de envenenamiento por cloro. Tal actividad podría indicar un nuevo intento de simular un “ataque” químico dirigido contra civiles y luego acusar al gobierno sirio por ello, advirtió el Centro.
Fuente: RT