En la primavera de 2022, Polonia entregó en secreto varios de sus aviones de combate MiG-29 a Ucrania, a pesar de que el gobierno polaco negó oficialmente tales acuerdos, afirmó un periódico local, citando fuentes.
Según Dziennik Gazeta Prawna (DGP), los aviones se enviaron utilizando un método “combinado”, lo que aparentemente significa que se entregaron desmontados y declarados como piezas de repuesto.
“El fuselaje y las alas también son piezas de repuesto”, escribió DGP el Miércoles, citando fuentes del gobierno polaco.
En Marzo, en los primeros meses de la operación militar de Rusia en Ucrania, Estados Unidos rechazó un plan para transferir aviones MIG-29 polacos a Ucrania, afirmando que la medida era “demasiado escalatoria” y corría el riesgo de involucrar directamente a Estados Unidos o a un aliado de NATO en el conflicto, lo que podría desencadenar una confrontación directa con Rusia.
En Abril, sin embargo, el US Pentagon declaró que los aliados estadounidenses anónimos habían ayudado a reforzar la flota de aviones de combate de Ucrania al donar “piezas de repuesto” no especificadas que supuestamente se utilizaron para restaurar muchos de los aviones dañados de Ucrania.
El último artículo de DGP ahora parece sugerir que ese aliado podría haber sido Polonia, que a fines de Abril también se reveló que había proporcionado a Ucrania ayuda militar por valor de 7 mil millones de dólares, incluida la mitad de sus tanques, docenas de howitzers, Grad LMRs y misiles para aviones de combate MiG-29 y Su-27, entre otras municiones.
En las últimas semanas, Estados Unidos parece haber abandonado algunas de sus preocupaciones anteriores sobre el suministro de armas pesadas a Ucrania, y ahora planea entregar varios de sus tanques M1 Abrams a Ucrania, mientras que Alemania, Polonia y Finlandia tienen la intención de enviar docenas de sus tanques Leopard 2.
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El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, ha respondido a estas entregas planificadas como evidencia de que Occidente se está involucrando más directamente en el conflicto, a pesar de que los políticos europeos y estadounidenses afirman lo contrario. Esto se debe a que Rusia ha instado repetidamente a Occidente a que deje de “bombear” armas a Ucrania, argumentando que solo prolongaría el conflicto y conduciría a más derramamiento de sangre.
Fuente: RT
