Los informes sobre una reducción considerable del suministro de combustible a Alemania a través del gasoducto Nord Stream 1 suscitaron serias preocupaciones tanto en Alemania como en la Unión Europea.
La razón anunciada oficialmente es la incapacidad de la empresa Siemens para reparar turbinas de compresores de gas. Por lo tanto, Gazprom, siguiendo las instrucciones de Rostekhnadzor (Servicio Federal de Supervisión Ambiental, Tecnológica y Nuclear de Rusia ), detuvo temporalmente la operación de las turbinas. Como resultado, dos de cada cuatro compresores de gas se han parado desde principios de Junio. El consumo diario de gas natural ha disminuido en un 60 por ciento.
Hace una semana, la alemana Siemens anunció que las sanciones contra Rusia hicieron imposible que la compañía devolviera una turbina para el gasoducto Nord Stream 1 a Gazprom después de que esta fue reparada en Canadá. Las turbinas han sido renovadas en la planta de Montreal y estaban listas para su envío, dijo un portavoz de Siemens. El problema “parece no ser técnico, sino político o más bien geopolítico.”
Rusia reduce suministro de gas a Francia
El precio en las transacciones de futuros de gas aumentó bruscamente y alcanzó hasta 1,500 dólares por mil metros cúbicos en ese contexto.
A su vez, el ministro de Economía alemán, Robert Habeck, dijo que la reducción en el suministro de gas fue un intento que hizo Rusia de “distorsionar el mercado y aumentar los precios.”
Nord Stream 1 es la única esperanza de Europa
De hecho, la suspensión, incluso parcial, del Nord Stream 1 se convierte en una barrera significativa para bombear gas ruso a compradores europeos simplemente porque es la única ruta completamente funcional para el suministro de gas natural a Europa.
El segundo sistema de transporte de gas (a través de Ucrania), fue víctima de la ambición de Kiev, que se negó a aceptar gas en Mayo a través de la estación de distribución de gas Sohranivka en el área controlada por Rusia de la región de Lugansk.
Un poco después, Rusia anunció que no suministraría gas a través de la sección polaca del gasoducto Yamal-Europe debido a la imposición de sanciones de represalia contra la empresa polaca propietaria del gasoducto.
Guerra de desgaste del gas
El analista de negocios Gleb Prostakov cree que realmente no importa si los problemas que describió Siemens fueron la verdadera razón de la fuerte reducción en los suministros de gas.
La guerra del gas, que ya comenzó con la implementación del sexto paquete de sanciones, ha ido ganando impulso a pesar de que los funcionarios europeos han declarado repetidamente que la Unión Europea no veía el gas ruso como un objetivo potencial para las sanciones.
“Ellos entienden que no hay alternativa al gas ruso. Rusia representa hasta el 40 por ciento del consumo de gas de la Unión Europea. A diferencia del petróleo, que se transporta principalmente por mar, el gas se transporta principalmente a través de gasoductos. Sin embargo, en Europa no existe una infraestructura desarrollada para el consumo de gas natural licuado. Además, el mundo carece de recursos de excedente en todo el mundo.
Por el contrario, la Unión Europea es un mercado preferido para Gazprom. Rusia suministró hasta el 70% de sus exportaciones de gas a países europeos. Sin embargo, Rusia parece estar avanzando con más confianza en la confrontación actual”, dijo Vzglyad citando a Prostakov.
Hablando en el St. Petersburg International Economic Forum (SPIEF), el jefe de Gazprom, Alexei Miller, dijo que la compañía no estaba decepcionada con una disminución en los suministros de gas a la Unión Europea, ya que los precios de las materias primas aumentaron simultáneamente varias veces. También notificó a las contrapartes que Rusia estaba introduciendo un nuevo principio en las ventas de gas:
“Nuestro producto – nuestras reglas.”
“Nuestro producto, nuestras reglas” – Gazprom
Vladimir Chizhov, embajador de Rusia en la Unión Europea, advirtió que Nord Stream 1 incluso podría suspender operaciones en su totalidad apagarse y que todas las turbinas de compresores de gas se enviarían a Canadá para su reparación.
La Unión Europea tiene la intención de suspender por completo el uso del gas natural ruso y otras fuentes de energía. El liderazgo de la Unión Europea está buscando activamente nuevos proveedores, preparándose para construir infraestructura de GNL y de energía verde.
Es difícil decir si la Unión Europea va a tener éxito aquí.
“Rusia ha llegado a comprender que el gas se ha convertido en un arma geopolítica que Rusia debería usar aquí y ahora. Ellos comienzan a reorientar los suministros, y esto es lo correcto, porque las sanciones de la Unión Europea y los Estados Unidos han proporcionado a Rusia todas las razones para tomar represalias”, dice Prostakov.
Las instalaciones europeas de almacenamiento de gas tienen muy pocas existencias en la actualidad. En Alemania, por ejemplo, solo están llenos al 56%. Si continúa así, Alemania se enfrentará a una situación de paralisis para su economía.
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Rusia también tiene problemas con los que lidiar. Se trata de los problemas de transporte de gas de Rusia. Reorientar los suministros de gas hacia el Este llevará cinco años, por decir lo menos. Cuando las instalaciones de almacenamiento de gas de Rusia estén llenas, la producción de gas tendrá que reducirse.
Guerra por la supervivencia
La guerra del gas es una guerra por la supervivencia en la política energética, y ambas partes sufrirán pérdidas significativas en esta guerra.
Para Rusia, la reducción en el suministro de gas está asociada con una disminución en los ingresos de exportación y, probablemente, con la necesidad de detener parcialmente la producción. Para Europa, el próximo invierno puede tener consecuencias aún peores, como:
- paros industriales a gran escala;
- hogares fríos;
- dificultades con los suministros de productos;
- migración interna en la Unión Europea;
- crecimiento crítico de las tensiones sociales.
Es posible que la Unión Europea no pueda hacer frente a ello.
Fuente: Pravda
