Europa

Turquía no ha visto “una sola ventaja” con la membresía de NATO, debería cortar los lazos – medios

Turquía no ha disfrutado de una sola ventaja en su membresía en NATO, y el único argumento real a favor de permanecer en el bloque es el derecho de veto, pero incluso ese beneficio tiene sus límites, cree el colaborador de Cumhuriyet, Mehmet Ali Guller.
En un artículo el Lunes titulado ‘The US Will Not Cut the NATO Bond, Turkey Should’, Guller argumentó que a través de sus 70 años de membresía en el bloque occidental, “no hay una sola respuesta satisfactoria a la ventaja que hemos visto.”
El columnista desestimó los temores de que Estados Unidos pudiera expulsar a Turquía de la alianza, a pesar de los recientes llamamientos en ese sentido en los medios estadounidenses, argumentando que una “nueva frontera de NATO” sin Turquía a lo largo de la línea Grecia-Mar Egeo-Creta-Chipre-Israel convertiría los planes de Estados Unidos para convertir el Mar Negro en un “Lago de NATO” en “basura”.
Además, Guller cree que “NATO sin Turquía significa la desintegración de los planes de Estados Unidos para el Cáucaso y, como continuación de esa línea, el colapso de los planes para sus objetivos en Asia Central.”

Turquía fuera de NATO resultaría en la institucionalización de la cooperación ruso-turca-iraní, la posible membresía turca en la iniciativa de Asociación Euroasiática propuesta por Rusia y una oportunidad para que Turquía ayude a “forjar un nuevo orden mundial” junto con la Shanghai Cooperation Organization (SCO) y el grupo de naciones BRICS.

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Finalmente, “una NATO sin Turquía significa que Estados Unidos pierde su capacidad de obligar a Turquía a implementar las políticas que Estados Unidos quiere con la amenaza de desmembramiento. Porque una Turquía en Eurasia tendrá la oportunidad de tener una defensa fuerte”, enfatizó Guller.
Dadas las razones anteriores, señaló el columnista, Estados Unidos no quiere una Turquía fuera de NATO y, de hecho, hará todo lo que esté a su alcance para mantener a Turquía atada al bloque.
El año pasado, el US Secretary of State Antony Blinken dijo que Estados Unidos y NATO tienen un “gran interés en tratar de mantener a Turquía anclada a Occidente y alineada en otros temas críticos.”
“Es por eso que Estados Unidos no está pensando en una NATO sin Turquía. Estados Unidos quiere mantener a Turquía en Occidente a través de los lazos de NATO y controlar Turquía con organizaciones de tipo ‘Super-NATO'”, señaló el colaborador de Cumhuriyet.
En consecuencia, el sugirió, Turquía debería “sostener las tijeras” para liberarse de ataduras.

“Turquía debería cerrar el Mar Negro, el Cáucaso y las puertas occidentales de Asia Central a los Estados Unidos, y ser parte de la Greater Eurasian Partnership y el nuevo orden mundial. La forma de hacerlo es que Turquía corte sus lazos con NATO”, concluyó Guller.

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La relación estratégica de Turquía con Estados Unidos ha sido probada por una serie de problemas, incluida la decisión de Estados Unidos de expulsar a Turquía del programa de cazas F-35 por la compra de un sistema de defensa aérea de fabricación rusa, el apoyo de Estados Unidos a las milicias kurdas en Siria y la negativa de Estados Unidos a extraditar a Fethullah Gulen, un clérigo turco a quien el presidente Erdogan ha acusado de ser responsable del intento de golpe de Estado de 2016.
El mes pasado, las relaciones se tensaron aún más por la resistencia turca a la rápida aprobación de las ofertas de Finlandia y Suecia para unirse a NATO, con Turquía citando el supuesto apoyo de los dos países a los “terroristas” del Kurdistan Workers’ Party (PKK).”
Turquía se unió a NATO en 1952 y se ha convertido en uno de sus miembros más poderosos, con el segundo ejército más grande de la alianza después de Estados Unidos. El bloque utiliza Turquía para albergar su cuartel general del Allied Land Command, y las bases aéreas de Incirlik y Konya han sido utilizadas ampliamente por los miembros de la alianza durante las operaciones en la Primera Guerra del Golfo, la Guerra de Irak, las operaciones de 2015 en Irak y los esfuerzos de Estados Unidos en apoyo de los rebeldes antigubernamentales en Siria. Incirlik también alberga aproximadamente cincuenta bombas nucleares B61 estadounidenses. En 2019, Erdogan amenazó con cortar el acceso de Estados Unidos a la base si imponía sanciones a Turquía por su compra de S-400 rusos. Estados Unidos avanzó con las sanciones, dirigidas a la Turkish Presidency of Defense Industries, a finales de 2020, prohibiendo las licencias de exportación de armas de Estados Unidos e instigando la congelación de visas y activos de los funcionarios de la oficina. Turquía criticó la decisión y exigió que se revocara.

Fuente: Sputnik