Un jet ruso especialmente equipado para luchar contra incendios catastróficos se ha estrellado en la ladera de una montaña en Turquía mientras asistía a equipos locales, con funcionarios en Moscú informando que las ocho personas a bordo murieron en la tragedia.
El avión anfibio Beriev Be-200, que es capaz de tomar agua de fuentes naturales y liberarla en llamas ardientes, se estrelló en la región sur de Turquía de Marash el Sábado. Según el Ministerio de Defensa de Rusia, el avión llevaba cinco militares rusos y tres funcionarios turcos a bordo.
Las imágenes que circulan en línea muestran una columna de humo negro emitiendo desde el lugar del accidente.
Otro video muestra el avión volando extremadamente bajo sobre las montañas, luego desapareciendo de la vista detrás de uno de los picos. Momentos después, el humo comienza a elevarse por encima de él.
El avión se estrelló poco después de liberar agua, según muestra otro video granulado disponible en línea. El avión aparentemente fue incapaz de ganar suficiente altitud después de liberar su carga, y chocó con una montaña.
Hasta ahora, no ha surgido información sobre la causa potencial del accidente. El ejército ruso ya ha enviado un equipo de investigadores a Turquía para examinar el lugar del accidente.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha extendido sus condolencias a las familias de las víctimas, instruyendo al ministerio de Defensa para que otorgue premios póstumos a los militares rusos muertos en el accidente, dijo el servicio de prensa del Kremlin.
Un puñado de aviones de extinción de incendios han sido enviados a Turquía por Rusia para ayudar a la nación en su lucha contra los incendios forestales, que han plagado en las últimas semanas. Según los informes de los medios locales, el Be-200 accidentado estaba adscrito al departamento de bomberos de Adana.
Fuente: RT