Las autoridades fiscales francesas se han puesto en contacto con una serie de importantes empresas de tecnología de Estados Unidos exigiendo que paguen millones de euros, cuando avanza con su nuevo impuesto digital, a pesar de las críticas de Estados Unidos.
Amazon y Facebook se encuentran entre las compañías a las que se les ha notificado que se espera que paguen el impuesto del tres por ciento sobre los ingresos generados por las grandes compañías de tecnología que operan en Francia.
El ministro de Finanzas de Francia, Bruno LeMaire, ha estimado que el nuevo impuesto podría generar unos € 500 millones de euros (594 millones de dolares) en ingresos para el gobierno.
Estados Unidos ha criticado la medida como dirigida injustamente a compañías estadounidenses y amenazó con tomar represalias con aranceles sobre los productos franceses, incluidos el queso y el vino, lo que podría iniciar una guerra comercial entre las dos naciones.
El impuesto fue aprobado inicialmente por el gobierno francés en Julio de 2019, pero el país acordó suspender la recaudación del impuesto en Enero, para permitir que la Organisation for Economic Co-operation and Development (OCDE) creara un marco internacional para las empresas tecnológicas.
Las compañías tecnológicas normalmente han evitado el pago de impuestos en los países en los que operan, basando su sede en naciones con leyes tributarias más relajadas. Estados Unidos participó inicialmente en el proceso de la OCDE, pero se retiró de las conversaciones en Junio.
Un portavoz del Ministerio de Finanzas de Francia defendió la medida, diciendo a los medios británicos que “Francia sigue comprometida a encontrar una solución internacional para que las compañías digitales paguen su parte justa de impuestos al igual que otras compañías.”
Francia no es el primer país en introducir o anunciar planes para introducir un impuesto a los servicios digitales. España y el Reino Unido han aprobado una legislación similar para tratar de obligar a las empresas de tecnología a pagar una parte más justa del impuesto sobre los beneficios generados en esos países.
Fuente: RT
