Gran Bretaña evitó por poco una crisis financiera en Septiembre que podría haber visto colapsar totalmente algunos fondos de pensiones, dijo el Jueves el gobernador del Bank of England, Andrew Bailey, al Channel 4.
Cuando se le preguntó qué tan cerca estuvo el Reino Unido de una posible crisis económica total después de que se anunció el minipresupuesto de Liz Truss, Bailey dijo: “Creo que en el momento en que intervinimos, puedo decirles que los mensajes que estábamos recibiendo de los mercados eran que fueron horas.”
El llamado “minipresupuesto” de Truss incluyó los mayores recortes de impuestos desde 1972, financiados por un enorme aumento de los préstamos, sin una explicación de cómo el gobierno los devolvería. Las medidas provocaron que la libra esterlina se desplomara a un mínimo histórico frente al dólar y que el precio de los bonos del gobierno del Reino Unido, conocidos como gilts, colapsara.
El Bank of England intervino anunciando una expansión de su compra de bonos de emergencia para “restaurar las condiciones ordenadas del mercado.”
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“Se estaba volviendo inestable y estaba afectando a los fondos de pensiones, por ejemplo, y cómo estaban operando. Por lo tanto, tuvimos que intervenir rápidamente y con bastante decisión. Esto se sintió, y fue, una amenaza muy real para la estabilidad financiera”, dijo Bailey.
Su entrevista se produjo pocas horas después de que el regulador subiera la tasa de interés del 2.25% al 3% para tratar de frenar la creciente inflación.
Bailey también advirtió que Gran Bretaña se enfrentaba a su recesión más larga desde que comenzaron los registros y advirtió de un “camino difícil por delante” para el Reino Unido y sus hogares.
Fuente: RT
