El producto interno bruto de España cayó un 11 por ciento el año pasado, según mostraron los datos del Instituto Nacional de Estadística el Viernes. Eso es más de lo que la economía española se redujo durante los cinco años durante y después de la crisis financiera mundial.
Los historiadores dijeron que la economía de la nación marcó la caída más pronunciada desde la guerra civil de España de 1936-39.
Las estadísticas del think tank Funcas mostraron que el sector turístico crucial representaba solo el cinco por ciento del PIB de España (frente al 12 por ciento en 2019), ya que la pandemia del coronavirus paralizó la demanda de viajes a nivel mundial.
La agricultura fue el único sector económico que se expandió, creciendo un 4.7 por ciento con respecto en 2020. El gasto público aumentó en 4.5 por ciento, su tasa más alta desde 2008, mientras que el consumo privado cayó en 12.4 por ciento.
La introducción por parte del gobierno español de uno de los bloqueos más duros de Europa entre Marzo y Junio condujo a una caída del 17.9 por ciento de la actividad económica en el segundo trimestre. Sin embargo, hubo una modesta recuperación en los últimos tres meses, cuando un mayor gasto impulsó el PIB en un 0.4 por ciento respecto al trimestre anterior.
El gobierno proyecta un repunte del PIB del 7.2 por ciento este año, mientras que los analistas de mercado han reducido su pronostico del 6.5 por ciento al 6.3 por ciento.
El International Monetary Fund también ha reducido sus perspectivas a 5.9 por ciento, después de haber advertido que la recuperación de la eurozona se está deslizando detrás de las de otras economías avanzadas, incluidos Estados Unidos y Japón.
Fuente: RT