Las acciones estadounidenses sufrieron otra caida el jueves, cerrando el día con un desplome de más de 1,100 puntos mientras continúan las ventas masivas por los temores prolongados de los efectos del coronavirus COVID-19 en la economía mundial.
El Dow Jones Industrial Average Index terminó el día con una pérdida de 1,190.95 puntos y el S&P 500 con una pérdida de 137.63 puntos. El Nasdaq Composite cayó 414.30 puntos.
Las últimas cifras se producen a medida que las preocupaciones crecen cada vez más entre los inversionistas por los efectos que el coronavirus puede tener en la economía de los Estados Unidos, especialmente en el caso de que surjan más casos en toda la “Land of the Freedom” y comiencen a interrumpir las rutinas diarias y el gasto de los consumidores estadounidenses.
“Hemos golpeado un bolsillo de miedo”, dijo Gregory Faranello, jefe de cotización de tasas estadounidenses en AmeriVet Securities, según CNBC. “Esto es un gran problema … si esto fluye hacia los Estados Unidos, podríamos estar en problemas, porque, seamos realistas, el consumidor estadounidense es lo que mantiene unida a esta cosa.”
El cierre del mercado estadounidense el jueves pone las pérdidas de esta semana en más de 3,000 puntos.
Cayendo en línea con el fabricante del iPhone, Apple, Microsoft y la cervecera Budweiser Anheuser-Busch InBev fueron las últimas entre otras compañías en observar que las interrupciones relacionadas con el coronavirus les impedirían cumplir con las previsiones de ingresos trimestrales.
Tom Hainlin, global investment strategist en Ascent Private Capital Management, dijo a CNBC que la aparición del coronavirus COVID-19 ha dejado a los inversionistas “extremadamente cautelosos en el corto plazo.”
“Nadie parece ser un experto en el coronavirus. … No hemos visto nada como esto realmente en nuestras vidas como inversionistas “, Hainlin señaló.
En un informe del jueves a los clientes, el gigante de la banca de inversión Goldman Sachs revisó su estimación de ganancias para las compañías estadounidenses en 2020, y predijó que no verán ningún crecimiento para el año como resultado del brote de coronavirus.
“Nuestras previsiones de ganancias reducidas reflejan la severa disminución de la actividad económica china en el primer trimestre, la menor demanda final para los exportadores estadounidenses, la interrupción de la cadena de suministro para muchas empresas estadounidenses, una desaceleración en la actividad económica estadounidense y una elevada incertidumbre comercial”, David Kostin, chief US equity strategist para la compañía, escribió en el informe.
Kostin más tarde señaló en la actualización que “una pandemia más grave podría conducir a una interrupción más prolongada y una recesión en Estados Unidos.”
Aproximadamente dos horas antes de que sonara la campana del día, el gobernador demócrata Gavin Newsom de California celebró una conferencia de prensa, revelando que un total de 33 personas habían dado positivo en el “Golden State” para el coronavirus COVID-19. Más de 8,400 personas están siendo monitoreadas en el estado para detectar posibles infecciones.
Hasta el jueves, ha habido más de 82,500 casos confirmados de COVID-19, con más de 78,000 reportados en China continental, según el Johns Hopkins University Center for Systems Science and Engineering. Aunque se reporta que más de 33,000 personas se han “recuperado” de la enfermedad, el COVID-19 ha cobrado la vida de unas 2,810 personas.
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En un intento por aliviar los temores de COVID-19, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se dirigió al público estadounidense el miércoles y destacó que Estados Unidos “gastará lo que sea apropiado” para combatir el potencial aumento de los casos de coronavirus dentro de las fronteras de Estados Unidos. En la sesión informativa, Trump también reveló que el vicepresidente estadounidense Mike Pence, quien ha sido criticado previamente por su manejo del brote de VIH en Indiana, lideraría el “coronavirus task force”.
Fuente: Sputnik
