Filipinas comenzó a devolver docenas de contenedores llenos de basura a Canadá el viernes. La medida podría terminar con una disputa de seis años entre los dos países.
Durante la noche, se cargaron sesenta y nueve contenedores con cerca de 2,500 toneladas de desechos domésticos (incluidas botellas de plástico, bolsas, periódicos y pañales) en un barco en el puerto de Subic, al noroeste de Manila. Los contenedores salieron el viernes para un viaje de un mes a la ciudad canadiense de Vancouver.
“Aaaaaaadiós, como lo decimos … La basura se ha ido, buen viaje”, el secretario de Relaciones Exteriores de Filipinas, Teodoro Locsin, escribió en Twitter, publicando imágenes de la embarcación partiendo.
Hace tres años, un tribunal de Filipinas declaró ilegal la importación de 2,400 toneladas de residuos canadienses. Los residuos se había etiquetado incorrectamente como plásticos para reciclar. El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, luego ordenó que los residuos se enviaran de vuelta, amenazando con arrojarlos frente a la embajada de Canadá en Manila, o navegar personalmente con los residuos y dejarlos en aguas canadienses. “Vamos a luchar contra Canadá. Declararé la guerra contra ellos “, Duterte dijo.
Canadá explicó que el desperdicio, exportado a Filipinas entre 2013 y 2014, fue una transacción comercial privada realizada sin el “consentimiento” del gobierno canadiense.
El país asumió la responsabilidad de devolver la basura, pero no cumplió con el plazo. Filipinas luego retiró a sus enviados diplomaticos en Canada.
“El gobierno de Canadá está tomando todas las medidas necesarias para garantizar el transporte, manejo y eliminación segura y ambientalmente racional de los desechos (canadienses) en Canadá”, dijo a Reuters Mark Johnson, spokesman for Canada’s environment and climate change ministry.
El portavoz del presidente Duterte, Salvador Panelo, dijo que espera que los lazos con Canadá vuelvan a la normalidad. El secretario de Relaciones Exteriores de Filipinas, Teodoro Locsin, dijo que a los diplomáticos a quienes había ordenado que salieran de Canadá se les había dicho que regresaran.
“Tomen sus vuelos de regreso. Gracias, y lamento los problemas por los que pasaron para llevar a casa este punto … Este es el fin del asunto … Hay más que basura entre nosotros “, escribió Locsin en Twitter.
A principios de este año, Filipinas envió 6,500 toneladas de basura a Corea del Sur, declaradas erróneamente como escamas de plástico.
La disputa entre países en desarrollo y países desarrollados por las importaciones de basura se ha intensificado en los últimos años. Estos últimos se ven obligados a depender principalmente de sí mismos en su futuro tratamiento de residuos.
China, que durante años recibió la mayor parte de los desechos plásticos de todo el mundo, cerró sus puertas a la basura extranjera en 2018. Desde entonces, se han redirigido enormes cantidades de residuos de plástico al sureste asiático, incluidas Malasia, Indonesia y, en menor medida, Filipinas. Estados Unidos se apresuró a culpar a China y le instó a reconsiderar su “catastrófica” prohibición de las importaciones de basura extranjera.
La situación empeoró cuando India, otro importante importador de residuos, siguió el ejemplo de China y también prohibió la importación de residuos de plástico sólido.
Malasia, el principal destino del mundo para los desechos plásticos después de China, dijo el martes que devolvería hasta 3,000 toneladas de desechos a los países de origen, incluidos Australia, Bangladesh, Canadá, China, Japón, Arabia Saudita y Estados Unidos.
Según las estadísticas del Worldwide Fund for Nature, cada año se producen alrededor de 300 millones de toneladas de plástico. Gran parte de esto está terminando en vertederos o contaminando los mares, en lo que se ha convertido en una creciente crisis internacional.
Fuente: RT
