Las plataformas de comercio electrónico (e-commerce) de China han eliminado los productos de Dolce & Gabbana de sus sitios web luego de que su campaña publicitaria fuera considerada racista por los chinos y por un supuesto post del fundador de la compañía afirmando que los chinos “ignorantes y sucios” comen perros.
Los artículos de D&G desaparecieron de los principales minoristas en línea, como Tmall y JD.com de Alibaba, y las páginas previamente vinculadas a los productos de la marca dejaron de estar disponibles. La plataforma de comercio electrónico NetEase Inc. y el minorista de artículos de lujo Secoo también eliminaron los listados de la marca.
Mientras tanto, Haikou Meilan Airport Duty Free Shop dijo que eliminó todos los productos de D&G y publicó una foto de estantes vacíos en su cuenta de redes sociales.
Acusaciones de estereotipos raciales se produjeron poco después de que D&G publicara tres clips publicitarios que mostraban a una mujer asiática que intentaba comer grandes porciones de comida italiana, incluida pizza, spaghetti y un cannoli. Los videos se publicaron en la cuenta oficial de la casa de modas en Instagram y provocaron una indignación inmediata en las redes sociales chinas con usuarios que lanzaron el hashtag #BoycottDolce.
La reacción viral obligó a la marca italiana a cancelar abruptamente su desfile de modas en Shanghai, programado para el 21 de noviembre, luego de que numerosas celebridades, entre ellas Zhang Ziyi y Li Binging, se retiraron del evento. La popular cantante Wang Junkai y la modelo Dilraba Dilmurat terminaron sus acuerdos para ser los embajadores de la marca.
La notoria campaña también fue publicada en la plataforma de redes sociales chinas Weibo. El servicio de microblog eliminó la campaña a menos de 24 horas después de haber sido cargada. En Weibo, el movimiento Boycott Dolce ha sido discutido más de 18,000 veces.
Video was removed on Instagram
El escándalo se agravó luego de que el cofundador de la casa de modas Stefano Gabbana fuera acusado de publicar comentarios inapropiados en su cuenta de Instagram. Las publicaciones, que provocaron aún más furia, presentaron una pila de poo emoji y calificaron al país (China) como “Mafia de olor sucio ignorante” (“Ignorant Dirty Smelling Mafia”), afirmando que los chinos comen perros.
Video was removed on Instagram
El diseñador negó que él fuera la persona que escribió el mensaje de Instagram, y más tarde la marca lanzó una declaración afirmando que sus dos cuentas de Instagram habían sido hackeadas. La casa de modas emitió una declaración en la que se disculpaba por “cualquier angustia causada por estos mensajes no autorizados”.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Geng Shuang, expresó su esperanza de que el escándalo no se convierta en un problema “diplomático”, mientras que la Communist Party Youth League instó a las compañías extranjeras que trabajan en China a respetar la cultura milenaria del país y su gente.
Según los datos compilados por Bloomberg, los consumidores chinos gastaron más de $ 100 mil millones en compras de lujo el año pasado, un tercio del total mundial.
Fuente: RT