La República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte) no puede confiar en los Estados Unidos de América. Los Estados Unidos no cumplen sus promesas, no honran sus tratados ni obedecen las leyes internacionales. Esta no es una opinion, es la historia de los Estados Unidos, comenzando con las muchas promesas y tratados rotos con los nativos americanos a quienes arrebataron sus territorios.
Los Estados Unidos han roto promesas y tratados en todos los rincones del mundo. Estados Unidos no obedece la carta de las Naciones Unidas, que es un tratado. Desacata el derecho internacional, que se basa en tratados. Los Estados Unidos habitualmente inician guerras asimétricas, que es agresión y el peor de todos los crímenes de guerra. Destruye naciones, dejando a millones de personas muertas, muriendo y en la miseria.
Libia fue una vez una nación próspera. Muammar Gaddafi era un dictador excéntrico, pero tenía un amor por Libia y su gente. Bajo el gobierno de Gaddafi la gente disfrutaba de un alto nivel de vida, libertad económica e igualdad de género. La educación y la atención médica eran gratuitas. Tener un hogar y comida era considerados un derecho humano. La riqueza petrolera de Libia benefició al pueblo.
Gaddafi fue atacado y vilipendiado por los Estados Unidos durante décadas. Después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en New York, Gaddafi cooperó con los Estados Unidos en la War on Terror. Eso no quiere decir que la War on Terror fuera algo bueno, pero Gaddafi fue amistoso con los Estados Unidos. En más esfuerzos para establecer relaciones amistosas con los Estados Unidos, Gaddafi desnuclearizó Libia en el 2003. El presidente George W. Bush elogió a Libia por su desnuclearización y sugirió a Libia como modelo para Corea del Norte. En 2011, el presidente Obama destruyó Libia y conspiró con los rebeldes para asesinar a Gaddafi. El US Secretary of State de Obama (Hillary Clinton) se mofó después diciendo ” we came, we saw, he died…ha,ha,ha”.
Irak no tenía un programa de armas nucleares desde principios de los 90. Después de la Primera Guerra del Golfo en 1991, Saddam Hussein cooperó con las Naciones Unidas y los inspectores de la International Atomic Energy Agency (IAEA) hasta la invasión estadounidense en 2003. Los inspectores de armas (nucleares) desaconsejaron la invasión y recomendaron que prosiguieran las inspecciones. El presidente estadounidense George W. Bush invadió de todos modos Iraq basado en mentiras (ahora conocido) de que Saddam Hussein tenía un programa de armas nucleares. Después de la invasión y destrucción del Iraq, 1625 inspectores de armas pasaron los dos años siguientes registrando Iraq y no encontraron armas de destrucción masiva.
Estados Unidos sigue acusando a Irán de tener un programa de armas nucleares, aunque la IAEA certifica que no lo tiene, y las 16 agencias de inteligencia estadounidenses han dicho que Irán no ha tenido un programa de armas nucleares activo desde 2003. Los hechos no le importan a Estados Unidos. Ellos crean su propia realidad alternativa conveniente a sus intereses. Con base en su propia irrealidad, los Estados Unidos pueden inventar cualquier razón para imponer sanciones e invadir países asimétricos.
Irak desnuclearizado, Libia desnuclearizada e Irán desnuclearizado. Estados Unidos invadió Irak debido a la mentira de la existencia de armas nucleares. Libia fue invadida en base a la irrealidad inventada de que la invasión fue por los derechos humanos. Estados Unidos ha impuesto sanciones a Venezuela porque no la considera “suficientemente democrática”. Estados Unidos impuso sanciones contra Rusia por su supuesta invasión a Ucrania, después de un golpe de Estado instigado por Estados Unidos que depuso al president elegido democráticamente por los ucranianos, Viktor Yanukovych.
Si Corea del Norte se desnucleariza completamente y Estados Unidos eliminan todas las sanciones económicas, no hay forma de garantizar que algún futuro presidente estadounidense no acusará a Corea del Norte de operar en secreto un programa nuclear. O los Estados Unidos pueden inventar un evento de bandera falsa o utilizar un “reclamo falso” para imponer sanciones económicas. Una farsa es un problema falso que distrae del verdadero problema.
Las sanciones económicas son armas financieras de destrucción masiva que matan a cientos de miles de personas. Estados Unidos siempre puede encontrar una excusa para imponer sanciones, como lo ha hecho con Venezuela. Con Venezuela, el verdadero problema no es la democracia. Venezuela tiene elecciones democraticas regulares, mientras que Estados Unidos respalda a muchos dictadores y monarcas absolutistas en todo el mundo (Arabia Saudita, United Arab Emirates, Qatar, etc). El verdadero problema es que Venezuela nacionalizó su riqueza petrolera para beneficiar a su propia gente, lo que le costó a la petrolera estadounidense Exxon y a otras corporaciones petroleras estadounidenses perder miles de millones de dólares en ganancias.
Las supuestas violaciones a los derechos humanos en Corea del Norte son una “amenaza”, que las fábricas de propaganda de los Estados Unidos siguen difundiendo. A los desertores norcoreanos se les paga una recompensa de hasta $ 860,000 dependiendo de la inteligencia y el valor de la propaganda que puedan aportar. Las historias de abusos contra los derechos humanos en Corea del Norte no se basan en hechos, sino que son rumores basados en rumores y propaganda. A los Estados Unidos no les importan los derechos humanos. Lo único que le importa a la política exterior de Estados Unidos es su imperio y el cuidado de los intereses corporativos de los Estados Unidos en todo el mundo. De lo contrario, los Estados Unidos harían algo acerca de los abusos contra los derechos humanos en Arabia Saudita.
Arabia Saudita es una monarquía absolutista y el régimen más brutal del mundo. Estados Unidos es cómplice del bombardeo genocida y el bloqueo de Yemen por parte de Arabia Saudita, que está matando de hambre a millones de civiles. Arabia Saudíta decapita o crucifica a más de 100 prisioneros cada año. Uno nunca escucha ni una palabra del US State Department sobre los derechos humanos en Arabia Saudita.
Estados Unidos nunca grazna sobre los derechos humanos en Colombia, Egipto, Honduras, Israel, Ruanda, Turquía, Ucrania o su propio y atroz historial de derechos humanos. Estados Unidos tiene el 5% de la población mundial y el 25% de los prisioneros del mundo; sin embargo, constantemente critica (sin presentar pruebas) que Corea del Norte supuestamente tiene un “gulag de 200,000 presos políticos”.
Estados Unidos ha creado un problema político relacionado con la trágica muerte de Otto Warmbier, pero el forense del condado de Hamilton, Ohio, dice que no encontró pruebas de que fuera torturado mientras estaba preso en Corea del Norte. Estados Unidos está usando su muerte para propaganda, y no porque se preocupe por la vida de una persona.
Estados Unidos ha asesinado a millones de civiles en sus guerras ilegales de agresión, ha bombardeado miles de hospitales, escuelas e infraestructuras civiles en los últimos 70 años. Estados Unidos tiene sitios obscuros donde tortura a las víctimas que ha secuestrado y encarcelado secreta e ilegalmente. El US Senate Select Committee on Intelligence Torture Report demuestra que Estados Unidos ha torturado hasta la muerte a prisioneros en sitios obscuros y en el campo de detención de la Bahía de Guantánamo en Cuba.
Entre 1948 y 1987, Corea del Sur fue gobernada por dictadores titeres estadounidenses, como Syngman Rhee y Park Chung-Hee. Ellos mataron, torturaron y encarcelaron sin juicio a cientos de miles de surcoreanos que consideraban disidentes. Corea del Sur todavía aplica la represiva National Security Act , que es una violación de los derechos humanos. Esta ley criminaliza las opiniones políticas que considera antipatrióticas. Los activistas de la paz corren el riesgo de ser arrojados a la cárcel. En Corea del Sur es un crimen asociarse con cualquier persona sospechosa de ser comunista o simpatizante de Corea del Norte. Corea del Sur tiene miles de presos políticos bajo la National Security Act.
Los misiles de Corea del Norte son otro problema creado por los Estados Unidos basados en mentiras y propaganda. No es contrario al derecho internacional que un país tenga misiles, incluso misiles balísticos intercontinentales (ICBM). Todos los países tienen derecho a tener misiles para defensa propia, lanzar satélites y explorar el espacio exterior. En realidad, no es contrario a ninguna ley internacional que un país que no es signatario del Tratado de No Proliferación Nuclear tenga armas nucleares. Corea del Norte se retiró del Tratado de No Proliferación Nuclear en 2003, y tenía todo el derecho legal a hacerlo.
Corea del Norte tiene misiles y armas nucleares porque Estados Unidos la ha estado amenazando con invasiones y armas nucleares desde 1953. Corea del Norte es un país pobre, y económicamente es menos costoso para la autodefensa tener armas nucleares y misiles que mantener una fuerza aérea moderna y mantener una carrera de armamentos convencionales con Corea del Sur.
La amenaza de guerra en Corea tiene sus raíces en Washington (Estados Unidos) y no en Pyongyang (Corea del Norte). Estados Unidos es el agresor. Estados Unidos es una nación salvajemente violenta y agresiva con la ambición de ser un imperio que gobierne el mundo. Exige que otras naciones se sometan a su voluntad. Los Estados Unidos no dudan en utilizar la abrumadora violencia contra las naciones pequeñas para hacer cumplir su hegemonía. Los castigará hasta que se sometan o hasta que esten tan completamente destruidos que sean un ejemplo para otros países que incluso piensan en desobedecer los dictados de los Estados Unidos. Durante la Guerra de Corea, los Estados Unidos mataron a 3 millones de coreanos. Estados Unidos mató a otros 5 millones de asiáticos del sureste durante la Guerra de Vietnam. Millones han muerto en la War on Terror en la que Estados Unidos se auto otorgó el derecho de atacar cualquier parte del planeta (obviamente no ha atacado a sus aliados o a algun pais que tenga la capacidad militar para defenderse y derrotarlo). Los civiles han sido las principales víctimas.
El poder de los Estados Unidos es tan enorme que, si no fuera tan trágico, sería ridículo e irrisorio cuando los Estados Unidos afirman que Corea del Norte está amenazándolos. Corea del Norte es una nación de 25 millones de campesinos, con un Producto Interno Bruto de aproximadamente $ 20 mil millones de dólares y un presupuesto militar de $ 6 mil millones de dólares. Corea del Norte no es una amenaza para la seguridad nacional de los Estados Unidos, que tiene un ejército de alta tecnología y un presupuesto que excede $ 1 billón (1,000,000,000,000) de dólares por año.
Una guerra con los Estados Unidos sería una locura. Kim Jong-un y su gobierno no estan locos, pero sí lo estan muchos traficantes de guerra y criminales de guerra estadounidenses como John Bolton. Estados Unidos tiene una larga historia de locura de guerra, muy recientemente en Afganistán, Irak, Libia, Siria y Ucrania.
Es una locura nuclear de los Estados Unidos mover a NATO a la frontera de Rusia. En la instigación de Estados Unidos en Ucrania, el gobierno de Barack Obama (irónicamente, premio nobel de la paz) admitió que estaba dispuesto a arriesgarse a una guerra nuclear con Rusia. El Pentágono estadounidense planea locamente guerras nucleares limitadas y guerras nucleares que puede ganar. Estados Unidos tiene una pre-emptive nuclear strike policy de locos, lo que significa que otros adversarios con poder nuclear tienen que mantener su arsenal nuclear en alerta máxima en todo momento. Los riesgos de un accidente nuclear son enormes. Estados Unidos ha empujado el reloj del fin del mundo a 2 minutos antes del Armageddon. Lo unico que ha detenido a Estados Unidos es la doctrina militar rusa del mutual assurance destruction (MAD) y su Dead Hand system (Perimeter).
Corea del Norte no es paranoica para temer a los Estados Unidos y preparar sus defensas en consecuencia. Corea del Norte es muy consciente del uso de la guerra total por los Estados Unidos contra sus adversarios. La guerra total significa que nadie, incluida la población civil del enemigo, está fuera de los límites, y que nada, incluida la infraestructura civil, está exenta de destrucción. La guerra total también significa que las leyes internacionales, los tratados y las normas de la guerra civilizada no restringen a los Estados Unidos. Corea del Norte fue una víctima de la guerra total de los Estados Unidos en la década de 1950. Corea del Norte quiere evitar que se repita esa guerra teniendo un elemento de disuasión creíble para la autodefensa.
La mayoría de los estadounidenses desconocen los crímenes de guerra cometidos por los Estados Unidos durante la Guerra de Corea, pero casi todos los coreanos lo saben, tanto en Corea del Norte como en Corea del Sur. En raras ocasiones, un medio de comunicación convencional como The Washington Post tendrá un artículo como “The U.S. War Crime North Korea won’t Forget”. Más a menudo los medios de comunicación alternativos son la mejor fuente de la verdad histórica.
Estados Unidos bombardeó Corea con 635,000 toneladas de alto explosivos. Estados Unidos perfeccionó el napalm durante la Guerra de Corea y arrojó 32,500 toneladas de este en Corea. Cuando Estados Unidos finalmente se quedó sin objetivos militares, bombardeó las presas de irrigación de Corea del Norte, que inundaron las tierras de cultivo y causaron la inanición (muerte por hambre) masiva de civiles.
Durante la Guerra de Corea, el general Douglas MacArthur quería utilizar 30 bombas nucleares en Corea del Norte y China. El presidente Truman lo despidió, pero no porque MacArthur quisiera usar armas nucleares. Truman quería un general “responsable” a cargo de la destrucción nuclear de Corea del Norte y China. Truman preautorizó al reemplazo de MacArthur, el general Matthew Ridgeway, para usar bombas nucleares a discreción. Ridgeway evitó la Tercera Guerra Mundial al no usarlos, aunque Truman le había enviado bombas nucleares a Okinawa para ese fin.
Fue Truman quien usó bombas atómicas en Japón por la única razón de demostrar el poder de Estados Unidos a Joseph Stalin. Truman dividió Corea en 1945 para que Estados Unidos pudiera establecer una colonia en el sur. Truman intervino en la Guerra Civil Coreana antes de que las Naciones Unidas lo autorizaran, y públicamente amenazó con usar la bomba atómica en la Guerra de Corea. Truman comenzó la Guerra Fría con su Doctrina Truman de 1947, que más tarde casi resultaría en la destrucción del planeta en un holocausto nuclear.
Avanzando rápido en la década de 1990. La Unión Soviética se colapsa y hay una pausa en la Guerra Fría. Corea del Norte perdió a Rusia como su fuente más importante de ayuda externa y uno de sus principales mercados para las exportaciones. Entre 1994 y 1998, Corea del Norte sufre una serie de sequías e inundaciones. Las combinaciones de malas cosechas y la pérdida de la ayuda rusa crearon hambrunas e inanición en Corea del Norte. La propaganda de Estados Unidos acusa al gobierno de Corea del Norte de matar de hambre a su pueblo “para mantenerse en el poder”, mientras que Estados Unidos está imponiendo sanciones económicas que causan más inanición. Las agencias de inteligencia estadounidenses predijeron que Corea del Norte pronto colapsaría debido a las sanciones. Pero Estados Unidos tuvo una preocupación inmediata con el programa nuclear de Corea del Norte.
La administración Clinton tuvo una confrontación muy tensa con Corea del Norte en 1994 sobre el programa nuclear de Corea del Norte, muy similar al “fire and fury” de Trump en 2017. Estados Unidos acusó a Corea del Norte de trabajar en el desarrollo de armas nucleares (aunque Corea del Norte tiene todo el derecho legal de hacerlo). Corea del Norte tuvo que importar casi todo su petróleo y afirmó que estaba desarrollando energía nuclear para la generación de electricidad. Corea del Norte tiene el derecho legal a tener reactores nucleares tal como lo han hecho Japón, Corea del Sur y cualquier otro país. La guerra fue evitada cuando Corea del Norte y la administración Clinton negociaron un acuerdo llamado el Agreed Framework.
Bajo el Agreed Framework, Corea del Norte acordó no retirarse del Nuclear Non-Proliferation Treaty, abrirse a una amplia inspección del IAEA y congelar su programa nuclear. A cambio, la administración Clinton prometió compensar a Corea del Norte con la entrega de petróleo para la generación eléctrica y la construcción de dos reactores nucleares de agua ligera, que producen electricidad pero no plutonio apto para armas. Estados Unidos también acordó la suspensión de los ejercicios militares y la normalización de las relaciones diplomáticas (En otras palabras, dejar de fastidiar a Corea del Norte). Si el Agreed Framework le suena familiar, es de esperarse. Ahora es hacia donde nos dirigimos después de la cumbre de Kim Jong-un y Trump en Singapur.
¿Qué salió mal con el Agreed Framework? En primer lugar, Clinton fue duramente criticado por los republicanos y los intransigentes. Lo acusaron de apaciguamiento y de caer en el chantaje. Clinton respondió que Estados Unidos nunca tendría que cumplir sus promesas, porque Corea del Norte estaba al borde de la desintegración económica de su régimen. Estados Unidos se mantuvo firme en la entrega de petróleo a Corea del Norte y demoró la construcción de los reactores de agua ligera prometidos.
En segundo lugar, el Congreso de los Estados Unidos se negó a financiar las obligaciones de los Estados Unidos en virtud del Agreed Framework. El Congreso también se negó a levantar las sanciones económicas contra Corea del Norte. Corea del Norte respondió que se retiraría del Nuclear Non-Proliferation Treaty y reanudaría su programa nuclear si Estados Unidos no cumplía con sus obligaciónes. Clinton no pudo cumplir su promesa aunque quisiera, al igual que Trump podría no cumplir con sus promesas a Corea del Norte.
El rompimiento final del Agreed Framework se produjo en 2002, cuando el presidente George W. Bush declaró que Corea del Norte era un Axis of Evil. Acusó a Corea del Norte de trabajar secretamente en una bomba nuclear en violación del Agreed Framework y detuvo la entrega de petróleo y la construcción de los dos reactores nucleares de agua ligera. En respuesta, Corea del Norte se retiró del Nuclear Non-Proliferation Treaty y comenzó a trabajar en su programa nuclear, que tenía todo el derecho a hacer en virtud del derecho internacional.
Estados Unidos ha amenazado a la República Popular Democrática de Corea con armas nucleares, armas convencionales y armas financieras de destrucción masiva desde 1953. Esto es una violación del Nuclear Non-Proliferation Treaty por un país con energía y armamento nuclear amenazando a un país no nuclear. Corea del Norte tenía el derecho legal de retirarse del Nuclear Non-Proliferation Treaty debido a las amenazas de Estados Unidos. Corea del Norte desarrolló armas nucleares e ICBM para su propia defensa contra los Estados Unidos y su colonia, Corea del Sur. Corea del Norte no viola el derecho internacional al tener armas nucleares y misiles.
Estados Unidos ha amenazado a Corea del Norte con “fire and fury” si no se desnucleariza. Para evitar un ataque de los Estados Unidos, Corea del Norte se ofreció a negociar su desnuclearización a cambio de promesas de no agresión de los Estados Unidos.
Corea del Norte nunca puede confiar en las promesas de los Estados Unidos. Lo que un presidente estadounidense acuerda otro puede cancelarlo, al igual que Trump violó el Acuerdo Nuclear de Irán de Obama y Bush incumplió el Agreed Framework de 1994. Trump también revirtió la apertura de Obama con Cuba.
Estados Unidos tiene una larga historia de ruptura de tratados y violación de la ley internacional. Los Estados Unidos invadieron Afganistán con evidencia sin sustento de que Afganistán albergaba terroristas que fueron responsables de los ataques a los Estados Unidos del 11 de septiembre de 2001.
Fuente: Pravda