Los talibanes han comenzado a ocupar puestos en el gobierno tras su exitosa conquista de Afganistán. Entre los nombres se encuentran personas que aún están en la lista de sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU y un ministro con una recompensa de 5 millones de dólares por su cabeza.
Mullah Mohammad Hassan Akhund, cofundador y jefe del consejo de liderazgo de los talibanes, fue nombrado el martes Primer Ministro interino de Afganistán, con otros altos dirigentes talibanes aprobando su nombramiento. El Mullah Abdul Ghani Baradar, considerado el líder de facto del grupo militante, fue nombrado Viceprimer Ministro, según un portavoz talibán.
Akhund es considerado un terrorista por la ONU, la Unión Europa y el Reino Unido, y ha sido sancionado por el Consejo de Seguridad de la ONU, junto con todos los miembros del gobierno talibán nombrados el martes. Estados Unidos considera que algunas facciones talibanes son Organizaciones Terroristas Extranjeras, y sanciona a todo el Talibán como una organización “Specially Designated Global Terrorist”.
Baradar fue una vez buscado por los Estados Unidos, antes de ser capturado y encarcelado por las autoridades pakistaníes. Después de ocho años en una prisión pakistaní, fue liberado en 2018 y dos años más tarde hizo historia al convertirse en el primer líder talibán en hablar directamente con un presidente de los Estados Unidos, cuando habló con el entonces presidente Donald Trump por teléfono después de firmar un acuerdo de paz con los Estados Unidos.
Sirajuddin Haqqani fue nombrado Ministro interino del Interior, con su nombramiento destacándose por una razón: Haqqani es considerado un terrorista internacional por las autoridades estadounidenses, con el FBI ofreciendo una recompensa de hasta 5 millones de dólares por información que conduzca a su arresto.
Haqqani es buscado en relación con un ataque en 2008 a un hotel en Kabul, que mató a seis personas, incluido un ciudadano estadounidense. Haqqani también se dice que participo en ataques fronterizos contra Estados Unidos y las fuerzas de NATO en Afganistan, y supuestamente planeó asesinar el entonces presidente afgano Hamid Karzai in 2008.
Mullah Yaqoob, hijo del líder muyahidín y fundador de los talibanes Mullah Mohammed Omar, fue nombrado Ministro de Defensa interino. A pesar de su pedigrí guerrero, Yaqoob es considerado por occidente como un moderado para los estándares talibanes, y apoyó el fin negociado al conflicto afgano de 20 años.
El Ministro de Relaciones Exteriores en funciones y el Viceministro de Relaciones Exteriores en funciones, Amir Khan Muttaqi, y Abas Stanikzai ya son conocidos en Occidente, ya que han participado en las conversaciones de paz en Qatar durante el último año. Stanikzai, en particular, ha apoyado públicamente las relaciones cordiales con Estados Unidos, apareciendo en la televisión nacional el mes pasado para declarar también a Afganistán fuera de los límites de las operaciones pakistaníes contra la India, y prometiendo respetar los derechos de las minorías religiosas de su país.
La formación de un gobierno por parte de los talibanes se produce una semana después de que las últimas tropas estadounidenses partieran de Kabul, y casi un mes después de la caída de Kabul en manos del grupo militante. Aunque Estados Unidos no tiene diplomáticos en Afganistán, Estados Unidos negociará con los talibanes y presionará a los nuevos gobernantes de Afganistán para salvaguardar los derechos de las mujeres y las minorías religiosas, dijo el desprestigiado US Secretary of State Tony Blinken en una conferencia de prensa del US State Department el viernes. Blinken insistió en que Estados Unidos usará cualquier “influencia” que pueda para moldear el comportamiento de los talibanes, con la promesa de ayuda y asistencia financiera más probable.
Sin embargo, sin presencia militar estadounidenses sobre el terreno y con sus líderes de alto nivel ya endurecidos por décadas de guerra, privación y encarcelamiento, los talibanes pueden burlarse de las declaraciones de los funcionarios de Estados Unidos a miles de kilometros de distancia.
Fuente: RT