Panamá no renovará su participación en la Belt and Road Initiative de China, dijo el Domingo el presidente José Raúl Mulino.
El anuncio se produce inmediatamente después de la reunión de Mulino con el US Secretary of State, Marco Rubio, quien exigió cambios inmediatos en la gestión del Canal de Panamá, una vía fluvial clave construida por Estados Unidos a principios del siglo XX y entregada a Panamá en 1999. Estados Unidos cree que China tiene demasiada influencia sobre la vía fluvial.
“El memorando de entendimiento de 2017 sobre la Belt and Road Initiative no será renovado por mi gobierno”, dijo Mulino a los periodistas luego de las conversaciones con Rubio, y agregó que su gobierno también estudiará la posibilidad de rescindir el acuerdo antes, ya que no se renovará por un par de años.
Durante las conversaciones, Rubio advirtió a Mulino que al permitir la participación de China en el canal, Panamá está violando el tratado de 1977 con Estados Unidos que garantiza la neutralidad permanente de la vía fluvial. Rubio dijo que a menos que el país reduzca la influencia china, que Estados Unidos considera “una amenaza para el canal”, podría enfrentar posibles represalias estadounidenses.
La advertencia de Rubio siguió a las amenazas hechas en las últimas semanas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien dijo que Estados Unidos podría retomar el control del Canal de Panamá si no se reduce la presencia de China alrededor de la vía fluvial y Panamá no reduce las “tarifas ridículas” que Estados Unidos tiene que pagar por usarlo.
Trump reiteró su advertencia más temprano el Domingo, diciendo a los periodistas que “China está administrando el Canal de Panamá”, que fue “entregado tontamente a Panamá”, y Estados Unidos “lo recuperará, o sucederá algo muy poderoso”.
Mulino dijo que no percibió una amenaza inmediata de represalias estadounidenses después de sus conversaciones con Rubio, que describió como “respetuosas” y “positivas”. El también descartó negociaciones con Estados Unidos sobre la propiedad del canal.
“No hay duda de que el Canal es operado por nuestro país y seguirá siéndolo… El presidente Trump tiene su opinión sobre la presencia china, que será aclarada a su debido tiempo por las autoridades técnicas del canal”, afirmó Mulino.
Los funcionarios chinos han negado tener ningún interés en infringir la soberanía de Panamá sobre el canal. En Diciembre, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, dijo que China siempre reconocerá el Canal de Panamá como una vía fluvial internacional permanentemente neutral.
La Belt and Road Initiative de China es un programa de desarrollo global lanzado por China en 2013 que busca conectar países de todo el mundo a través de rutas terrestres y marítimas, así como construir infraestructura digital y física. Panamá fue el primer país latinoamericano en firmar la iniciativa.
En virtud de la iniciativa, CK Hutchison Holdings, con sede en Hong Kong, ganó en 2021 un contrato de 25 años para el control de dos puertos en las entradas del canal, y un consorcio de empresas chinas inició la construcción de un puente de 1,300 millones de dólares sobre la vía fluvial.
Fuente: RT