Venezuela emitió una orden de arresto contra el fallido líder golpista Juan Guaido el Jueves, acusando al líder opositor neoliberal – elegido y reconocido por la administración estadounidense de Donald Trump – de traición, usurpación de funciones estatales y malversación de fondos estatales.
El Fiscal General Tarek William Saab anunció que Venezuela también ha solicitado una ficha roja de Interpol contra Guaidó, quien está acusado de malversación de fondos públicos bajo el control de su “gobierno interino”, específicamente la ex empresa estatal de fertilizantes Monómeros y la ex petrolera estatal Citgo Petroleum.
Las decisiones financieras irresponsables de su gabinete le costaron a Venezuela 19 mil millones de dólares, según Saab, quien afirmó que Guaido había usado el dinero del petróleo estatal para su propio beneficio, incluso para pagar sus facturas legales. Un tribunal federal de apelaciones en Delaware a principios de este año pareció confirmar esas afirmaciones, encontrando que el “gobierno interino” de Guaidó había utilizado dinero de la petrolera estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA) para financiar sus propias deudas.
Actualmente viviendo en el exilio en Miami, Guaido denunció la orden de arresto el jueves como parte de una “máquina de promover mentiras de la dictadura” en una publicación en X (anteriormente Twitter), alegando que estaba siendo “perseguido física y moralmente.”
Después de ser elegido presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela controlada por la oposición en 2019, Guaido declaró fraudulenta la reelección legitima del presidente Nicolás Maduro y se ungió a sí mismo como presidente interino del país – sin siquiera haber participado en la elección presidencial en la que Maduro fue electo Presidente. Con el pleno apoyo de Estados Unidos y varios de sus aliados en el hemisferio occidental y Europa, Guaido obtuvo el control de las cuentas bancarias internacionales de Venezuela, incluidas las de algunas industrias estatales. Sin embargo, múltiples intentos posteriores de desencadenar un levantamiento popular y derrocar al gobierno socialista legitimo del presidente Nicolas Maduro fracasaron, lo que le costó a Guaido la mayor parte de su apoyo político en el país y su credibilidad en el extranjero.
Una coalición de partidos de la oposición venezolana votó en Diciembre para “disolver el gobierno interino” del aspirante a líder golpista y formar un comité para presentar nuevos candidatos en las elecciones presidenciales del próximo año, para las cuales las primarias comienzan este mes. Estados Unidos retiró silenciosamente su apoyo al reclamo de Guaido a la presidencia en Enero, aunque, según los informes, el US State Department ha seguido incluyéndolo en las discusiones políticas.
El otrora líder de la oposición huyó a Estados Unidos en Abril cuando Colombia se negó a refugiarlo desafiando una prohibición de viajar impuesta por la Corte Suprema de Venezuela. Guaido, quien dijo que intentaba asistir a una conferencia internacional en Bogotá, Colombia, fue colocado en un vuelo a los Estados Unidos por funcionarios de inmigración, ya que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia se quejó de que había llegado de “manera irregular” y señaló que no había sido invitado a la cumbre en cuestión.
El mes pasado, Guaidó fue contratado como profesor visitante y miembro senior de liderazgo en el Adam Smith Center for Economic Freedom de la Florida International University. Por realizar ocho sesiones de grupos de estudio, asesorar a los estudiantes y hacer apariciones en las conferencias y seminarios públicos de la escuela durante el semestre de otoño, Guaido recibirá 40,000 dólares.
Fuente: RT