El Pentágono ha reprobado en la primera auditoría integral de sus masivos $ 2.7 billones de dólares en activos, con solo cinco de las más de 50 entidades del US Departament of Defense que obtuvieron una calificación aprobatoria, con mala administración de fondos, discrepancias en el inventario, problemas de seguridad y otros problemas que afectan al resto.
El viernes, un día después de que se publicaran los hallazgos de la auditoría, el Pentágono confirmó que no podía brindar al público una “seguridad razonable” sobre cómo gasta el dinero de los contribuyentes estadounidenses, con problemas masivos en las prácticas contables de los distintos departamentos, incluidas declaraciones erróneas generalizadas en el gasto, identificación del inventario que en realidad no existía en el mundo real, problemas con el registro de los contratistas y la compra de millones de dólares en equipos que luego se almacenan sin usar en los almacenes del Department of Defense.
Los funcionarios del Pentágono hicieron todo lo posible para eliminar el impacto de los hallazgos de la auditoría, diciendo que era un “hito en la historia” la auditoría que se llevó a cabo. “Nosotros nunca pensamos que íbamos a aprobar una auditoría, ¿verdad? Todos apostaban contra nosotros, que ni siquiera haríamos la auditoría”, dijo el Deputy Secretary of Defence Patrick Shanahan. El Acting Pentagon inspector general, Glenn Fine, dijo que “lo más importante este año no son los “hallazgos”, sino que el departamento toma en serio la auditoría y busca corregir las deficiencias encontradas, que es lo que el departamento está haciendo”.
Sin embargo, otros no eran tan optimistas, ya que todos, desde políticos y periodistas hasta ciudadanos estadounidenses comunes, desahogaban sus frustraciones en Twitter ante el desastroso estado del Pentágono.
“Esta es exactamente la razón por la que debemos #AuditThePentagon”, escribió la congresista demócrata Barbara Lee. “El desperdicio, el fraude y el abuso sin control en el Pentágono son un insulto para el pueblo estadounidense”, ella subrayó.
Otros políticos, republicanos y demócratas por igual, intervinieron con comentarios similares, expresando preocupaciones y tratando de tomar el crédito por la iniciativa de la auditoría, que fue una de las promesas de campaña del presidente Trump en 2016.
Algunos usuarios sugirieron que el atroz desperdicio era un ejemplo de las prioridades equivocadas de la White House, señalando que solo una fracción de lo que se gasta en defensa podría financiar fácilmente otros programas importantes, como el cuidado de la salud.
A otros simplemente les desconcertó el enfoque despreocupado del Pentágono, y dijeron que los funcionarios lo trataban “como si no aprobar una auditoría no es un gran problema”, y señalaron que para los estadounidenses comunes, fallar en una auditoría podría significar una pena de cárcel.
Algunos usuarios estaban preocupados por el precio de la auditoría en sí.
Finalmente, algunos tomaron un enfoque menos serio, más sarcástico, diciendo que los hallazgos de desperdicios en el Pentágono no fueron precisamente una sorpresa.
Fuente: Sputnik