La decisión de Estados Unidos de entregar bombas de racimo a Ucrania es una provocación que está acercando a la humanidad a una nueva guerra mundial, dijo el Viernes el embajador ruso en Estados Unidos, Anatoly Antonov.
“Con tenacidad digna de un mejor uso, Estados Unidos continúa ‘aumentando las apuestas’ en el conflicto”, dijo Antonov en un comunicado.
“Nadie dudaba de la profunda participación de Estados Unidos en la confrontación en Ucrania, incluso sin bombas de racimo. Sin embargo, el nivel actual de provocaciones estadounidenses está realmente fuera de escala, acercando a la humanidad a una nueva guerra mundial.”
Antonov enfatizó que Estados Unidos está tan obsesionado con la idea de derrotar a Rusia que no se da cuenta de la gravedad de sus acciones, que solo conducen a un aumento en el número de víctimas y prolongan la agonía del régimen de Ucrania.
“La crueldad y el cinismo con que Estados Unidos abordó el tema de la transferencia de armas mortales a Ucrania es sorprendente”, dijo Antonov.
“La administración Biden ignoró por completo las tesis sobre la inhumanidad de tal paso, expresadas por expertos, activistas de derechos humanos y legisladores, haciendo la vista gorda ante las víctimas civiles. Ahora, por culpa de los Estados Unidos, durante muchos años habrá un riesgo de que civiles inocentes sean volados por submuniciones que no explotaron.”
Antonov continuó criticando la decisión de Biden como un gesto de desesperación por parte de Estados Unidos, ya que optó por ignorar abiertamente las objeciones planteadas por sus aliados.
“Las bombas de racimo son un gesto de desesperación”, dijo Antonov.
Arma terrorista altamente letal: Estados Unidos suministrará bombas de racimo prohibidas a Ucrania
“Tal medida habla del reconocimiento por parte de Estados Unidos y sus satélites de su impotencia. Sin embargo, aquí no quieren admitir sus propios fracasos y el fracaso de los intentos de las Fuerzas Armadas de Ucrania de llevar a cabo una ofensiva contra las regiones rusas. Por lo tanto, cometen una nueva locura.”
“Estados Unidos ignoró el rechazo de sus aliados con respecto al uso peligroso de bombas de racimo indiscriminadas”, dijo Antonov.
“Esto a pesar del hecho de que entre los miembros de NATO, hay muchos Estados que participan en la conocida Convention on Cluster Munitions. Las preocupaciones del Secretario General de la ONU tampoco significaron nada para la administración Biden.”
Haciéndo eco del punto de vista de Antonov, Konstantin Kosachev, quien se desempeña como vicepresidente de la Cámara Alta de Rusia, también hizo comentarios similares. El legislador ruso señaló que la decisión de Estados Unidos confirma efectivamente la disposición de Estados Unidos a matar civiles por el bien de las hostilidades continuas.
“De hecho, Estados Unidos confirmó la incapacidad de Ucrania para lograr algo sin el uso de las armas más condenadas, confirmó la disposición a matar civiles por el bien de continuar las hostilidades a cualquier costo y asumió la plena responsabilidad de todas las futuras víctimas de esta monstruosa arma”, dijo Kosachev en Telegram.
El comentario se produce momentos después de que Estados Unidos revelara un nuevo paquete de asistencia militar para Ucrania que incluye bombas de racimo, un arma controvertida prohibida en docenas de países y considerada durante mucho tiempo como un peligro para los no combatientes.
A menudo, las municiones no se encienden al desplegarse y la mayoría de las veces son detonadas por la actividad civil años después de que las hostilidades en las áreas afectadas llegan a su fin. De hecho, el Comité Internacional de la Cruz Roja ha informado que tales armas tienen una tasa de fracaso del 10-40%.
Poco después de que se hiciera el anuncio de las bombas de racimo, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, en una entrevista con los medios estadounidenses, afirmó que la medida era una “decisión muy difícil”, pero que lo hizo por recomendación del US Pentagon, ya que ” esta es una guerra relacionada con las municiones.”
Fuente: Sputnik
