Con la ofensiva ucraniana en marcha, Ucrania hasta ahora no tiene prácticamente nada que mostrar en el camino de las ganancias, mientras que las imágenes de tanques Leopard y vehículos de combate de infantería Bradley utilizados por las tropas ucranianas destrozados ya han comenzado a circular en las redes sociales.
A pesar de que Estados Unidos y sus aliados han estado suministrando “generosamente” a Ucrania armamento y vehículos militares durante el conflicto en curso, parece que las fuerzas ucranianas son “institucional y operativamente incapaces de absorber con éxito la amplia e inconsistente variedad de equipos y armamento” mientras están “bajo fuego y coacción”, dijo Karen Kwiatkowski, Teniente Coronel retirado de los Estados Unidos.
“Esto es culpa de Estados Unidos y NATO, que buscan aprovechar el patriotismo ucraniano para enfrentar y hostigar a Rusia, con el objetivo de apoderarse de la tierra, la gente y los recursos de Ucrania una vez que quede poca Ucrania, en una especie de mini – Plan Marshall, esta vez completamente administrado y dirigido por capitalistas compinches estadounidenses e internacionales, como Black Rock”, dijo Kwiatkowsky, ex analista del Departamento de Defensa de Estados Unidos, a Sputnik.
Ella sugirió que Estados Unidos y Gran Bretaña eran probablemente los que realmente necesitaban a Ucrania para lanzar esta contraofensiva y que parecería “como si los gobiernos occidentales vieran a Ucrania poco más que una película de horror, para su entretenimiento y beneficio.”
“Claramente, lo que Ucrania necesita es encontrar una manera de salir del ciclo político de Estados Unidos y la obsesión de expansión organizacional de NATO, y hacer la paz”, reflexionó Kwiatkowsky, postulando que tal acuerdo probablemente implicaría la separación del “lado ruso de la antigua Ucrania” del “lado ucraniano”.
Sin embargo, señaló que hasta ahora los políticos de Estados Unidos y el Reino Unido se han apresurado a reprimir cualquier intento de la parte ucraniana de “hacer señales o ruidos pacíficos.”
Mientras tanto, el Director Ejecutivo del Consejo para el Interés Nacional y ex jefe de la estación de la CIA, Phillip Giraldi, ha observado que algunos medios de comunicación occidentales han estado tratando de hacer parecer que la contraofensiva ucraniana está teniendo éxito y que las fuerzas del régimen de Ucrania están “invadiendo las posiciones rusas.”
Al comentar sobre este desarrollo, Giraldi sugirió que los políticos en los Estados Unidos, el Reino Unido y Alemania “necesitan poder hablar positivamente sobre lo que está ocurriendo” en Ucrania, ya que el público en sus respectivos países está comenzando a volverse en contra del conflicto “a medida que avanza y consume cientos de miles de millones de dólares en equipos.”
El además, sugirió que las personas en Estados Unidos, Gran Bretaña y Alemania no están muy entusiasmadas con sus gobiernos que respaldan directamente al régimen en Ucrania, que describió como “un régimen que casi todos reconocen que es irremediablemente corrupto.”
“Se habla aquí en Washington de que los generales ucranianos podrían deponer a Zelensky y entablar negociaciones con Rusia”, agregó Giraldi.
Fuente: Sputnik