Los lanzacohetes HIMARS que Ucrania recibió de Estados Unidos han sido “modificados en secreto” para hacerlos inoperables con misiles de mayor alcance, incluso si Ucrania los obtiene de otros lugares, informó el Lunes el Wall Street Journal citando a funcionarios estadounidenses anónimos.
Un total de 20 lanzadores del Sistema de Cohetes de Artillería de Alta Movilidad M142 (HIMARS – High Mobility Artillery Rocket System) se han enviado a Ucrania desde Junio, junto con varios lotes de misiles guiados GMLRS y vehículos de servicio. Los GMLRS tienen un alcance de casi 80 kilómetros (50 millas).
Desde entonces, múltiples activistas han pedido que Ucrania también reciba cohetes ATACMS, con un alcance de más de 300 kilómetros. Estados Unidos se ha negado, hasta ahora. Incluso si la White House cambia de opinión, o Ucrania logra obtener los ATACM, o misiles de largo alcance similares, en otros lugares, no funcionarán en los HIMAR actualmente en el campo de battala en Ucrania, según WSJ.
Las modificaciones realizadas a los sistemas antes de que fueran enviados a Ucrania involucran “hardware y software”, señalaron los funcionarios anónimos que hablaron con el medio. El ejército ucraniano declinó hacer comentarios. Lo mismo hizo el US Pentagon, citando ” consideraciones de seguridad operativa.”
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Según WSJ, las modificaciones “reflejan temores entre los funcionarios de la administración de que su socio ucraniano podría dejar de cumplir su promesa de no atacar el territorio ruso con armas proporcionadas por Estados Unidos”, así como el deseo de la administración del presidente Joe Biden de “reducir el riesgo de una guerra abierta” con Rusia.
Rusia ha advertido repetidamente a Estados Unidos que proporcionar armas pesadas a Ucrania corre el riesgo de cruzar las “líneas rojas” de Rusia e involucrar directamente a Estados Unidos y NATO en el conflicto. Estados Unidos y sus aliados insisten en que no son parte en las hostilidades, mientras continúan armando a Ucrania.
En Junio, el US Secretary of State, Antony Blinken, dijo a los periodistas que Estados Unidos había recibido “garantías” de Ucrania de que los HIMARS no se usaría “contra objetivos en territorio ruso” y afirmó que existía “un fuerte vínculo de confianza entre Ucrania y Estados Unidos, así como con nuestros aliados y socios”.
Para Septiembre, sin embargo, Blinken aclaró que Estados Unidos no considera a Crimea ni a las otras cuatro partes de Rusia, las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, así como a las regiones de Kherson y Zaporozhye, que votaron para unirse al país, como nada más que territorio ucraniano y, como tal, objetivos legítimos para las armas suministradas por el US Pentagon.
La revelación del Lunes sobre las alteraciones en los lanzadores HIMARS también contradice la declaración de la enviada de Estados Unidos en Ucrania, Bridget Brink, quien dijo en Junio que la decisión sobre el alcance de los sistemas dependería “de la parte ucraniana.”
Fuente: RT