Las autoridades mexicanas arrestaron a un infame líder de un cartel de drogas, años después de que salió de prisión, informó el Viernes la AP.
Rafael Caro Quintero fue condenado por secuestrar y matar al agente de la DEA Enrique “Kiki” Camarena en 1985, pero un tribunal de apelaciones anuló su condena y Quintero fue liberado en 2013 antes de que la Corte Suprema de México revocara la decisión y confirmara su condena. El había pasado 28 años en prisión.
Desde entonces, según las autoridades, Caro Quintero ha vuelto a traficar drogas, desatando una sangrienta guerra territorial en el estado fronterizo de Sonora en el norte de México.
Caro Quintero era el líder del Cartel de Guadalajara. Se le culpa de la mayor parte de la marihuana, la cocaína y la heroína que ingresaron a los Estados Unidos a fines de la década de 1970.
La AP dijo que no hay más detalles, y su fuente solo habló bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a hablar sobre el arresto. Caro Quintero estaba en la lista de los fugitivos más buscados del FBI, con una recompensa de 20 millones de dólares colgando sobre su cabeza.
Según las autoridades, Caro Quintero atacó a Camarena debido a una redada en 1984 en una plantación de marihuana de la que Caro Quintero culpó a Camarena. El cuerpo del agente de la DEA fue encontrado aproximadamente un mes después de su desaparición, en estado de descomposición y con signos de tortura.
Sin embargo, en 2013, dos ex agentes de la DEA y un ex piloto contratado por la CIA afirmaron que la CIA era cómplice del asesinato de Camarena. El piloto de la CIA afirma que entregó armas al cartel a cambio de toneladas de cocaína que la CIA luego vendió en las calles de Estados Unidos para financiar a los contras nicaragüenses.
Según su relato, Camarena se había enterado del plan y amenazó con hacer sonar la alarma. Unos cinco meses después, dicen que el US Federal Security Directorate, a la que llamaron los ojos y oídos de la CIA en México, y que trabajó con los carteles más poderosos de México, secuestró a Camarena.
La CIA ha negado las acusaciones.
Fuente: Sputnik