El Gobierno de Biden se está preparando para llevar a cabo ciberataques dirigidos a redes rusas, informó el New York Times, describiendo la provocación como una medida de represalia diseñada para enviar un mensaje a Rusia.
Citando a funcionarios familiarizados con la operación, el NYT dijo que se espera que comience una “serie de acciones clandestinas” dirigidas a Rusia en las próximas tres semanas y que los ciberataques están destinados a ser “evidentes” para el presidente Vladimir Putin y los servicios de inteligencia de Rusia, pero no para el “mundo en general”.”
El ataque probablemente coincidirá con nuevas sanciones económicas contra Rusia, así como con una orden ejecutiva del Presidente Joe Biden que reforzaría la seguridad de las redes del gobierno de Estados Unidos.
En una entrevista la semana pasada, Jake Sullivan, national security adviser de Biden, dijo al NYT que apoyaba llevar a cabo operaciones clandestinas que serían “entendidas por los rusos, pero que podrían no ser visibles para el mundo en general”, argumentando que tales acciones forzarían una “amplia discusión estratégica” con Rusia.
El presunto ciberataque inminente ha sido enmarcado como una medida de represalia en respuesta al cyberataque de alto perfil de SolarWinds. El hackeo, reportado por primera vez en Diciembre, proporcionó acceso por puerta trasera a un programa de administración de redes ampliamente utilizado que es distribuido por la compañía SolarWinds con sede en Texas. Los hackers fueron capaces de utilizar la hazaña para comprometer los sistemas de más de 100 empresas comerciales de todo el mundo, así como nueve agencias gubernamentales de Estados Unidos. Descrito como uno de los ciberataques más grandes y sofisticados hasta la fecha, pasaron ocho meses antes de que se descubriera el hackeo.
Estados Unidos ha argumentado que el ataque solo podría haberse llevado a cabo con la ayuda de un gobierno extranjero. Las agencias de inteligencia estadounidenses han alegado que el hackeo era “probablemente de origen ruso”, pero no han proporcionado pruebas para tal afirmación. Rusia ha negado cualquier participación en el incidente, llamando a la acusación “otro intento sin fundamento” por parte de los Estados Unidos de desprestigiar a Rusia.
Hablando el mes pasado a CBS, Sullivan dijo que Estados Unidos usaría una “mezcla de herramientas vistas y no vistas” para castigar a Rusia por supuestamente llevar a cabo el ataque de SolarWinds.
Fuente: RT