El jefe de una misión de observación internacional de las elecciones de Estados Unidos ha acusado al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de “abuso grave de su cargo”, después de que Trump pidió que se ponga fin al conteo de votos en los estados clave.
“Lo más preocupante fue que con la fanfarria presidencial de la White House, es decir, con todas las insignias del poder, el comandante en jefe estadounidense pidió detener el conteo de votos debido a su supuesta victoria”, dijo Michael Link, jefe de la Organization for Security and Cooperation in Europe (OSCE), al periódico alemán Stuttgarter Zeitung el Jueves.
“Eso fue un abuso grave de la oficina presidencial”, Link agregó, calificando las afirmaciones de Trump – de juego sucio por parte de los demócratas – “sin fundamento.”
Con los votos aún siendo procesados, la campaña de Trump ha demandado judicialmente para detener el conteo en Michigan y Pensilvania, hasta que las boletas puedan ser examinadas por fraude. Otra demanda judicial de Trump en Georgia le pide al estado que escudriñe las boletas de voto en ausencia con más cuidado, y la campaña de Trump también ha tomado medidas legales para solicitar un recuento en Wisconsin.
Cuando Biden alcanzó a Trump y rebasó al presidente en Wisconsin, los demócratas atribuyeron el avanze a las boletas enviadas por correo, mientras que Trump culpó a los “vertederos de boletas sorpresa” por erosionar “mágicamente” su ventaja.
Cuando los votos aún se estaban contando en varios estados, Trump proclamo su victoria en las primeras horas del miércoles por la mañana y acusó al Partido Demócrata de usar el “fraude” para tomar la presidencia.
En un informe preliminar publicado el miércoles, la OSCE calificó las acusaciones de fraude de Trump como “infundadas” y elogió el “enorme esfuerzo realizado por los trabajadores electorales”, a pesar de lo que llamó “intentos deliberados del presidente en funciones de debilitar la confianza en el proceso electoral.”
Fuente: RT