La actriz Rose McGowan recibió fuego de los partidarios demócratas en Twitter, después de continuar su enfoque independiente al discurso público al acusar a los liberales estadounidenses de inutiles, y a Joe Biden de ser un violador.
“Usted es la estacion de oscuridad”, tuiteó el jueves la activista de MeToo, refiriéndose a Joe Biden y al Partido Demócrata. “Ustedes son monstruos”, ella agregó. “Ustedes son fraudes. Ustedes son la mentira.”
En ese punto, la diatriba estaba lejos de haber terminado. “¿Qué han hecho los demócratas para resolver algo?McGowan lamentó, acusando al partido de no ayudar a los pobres, a las minorías raciales, a las madres solteras y a los niños. “Los demócratas no han logrado nada”, concluyó la actriz, diciendo que ella cree que esta es la razón por la que el republicano Donald Trump ganó la presidencia en 2016.
Durante horas McGowan fue objeto de críticas por parte de los simpatizantes demócratas en Twitter, que tuvo su nombre en tendencia en los Estados Unidos el viernes.
En gran parte, sus criticos no estaban contentos con no tener a McGowan “a bordo con Biden”. Los usuarios de Twitter dijeron que la actriz “habia perdido la cabeza” y “debería eliminar su cuenta”.”
Muchos de estos cibernautas alegaron que cualquier ataque contra los demócratas va a “darle a Trump la elección.”
La estrella de Charmed tenía algunos defensores, quienes estuvieron de acuerdo con ella diciendo que “la Democratic National Convention (DNC) ha demostrado ser mentirosos e hipócritas” y que el partido “merece críticas”.
¿Quién es un maldito mentiroso? – La familia del crimen Biden, Parte 1 – Guy Somerset
McGowan misma no rehuía involucrar a sus detractores. Ella se dirigió a la idea de que no votar por Biden es similar a “ayudar a Trump a sabiendas” diciendo que ella “no vota por violadores.”
McGowan se refería a las acusaciones de agresión sexual que la ex empleada Tara Reade vertio contra el ex vicepresidente estadounidense a principios de este año. El incidente resultó controvertido, ya que se percibió en gran medida que había sido ignorado por los funcionarios de la DNC, a pesar de su apoyo público al movimiento contra el acoso MeToo.
