El depuesto presidente boliviano Evo Morales (2006-2019) advirtió que todavía es el jefe de Estado constitucional de su país en virtud de la legislación que lo consagra como tal hasta el 22 de enero del año que viene.
La Ley 651 del 20 de enero de 2015, me proclama como Presidente Constitucional hasta el 22 de enero de 2020″, dijo Evo Morales – que reside en Argentina – desde las redes sociales.
Esta ley “no fue abrogada, anulada y menos declarada inconstitucional, por lo que cualquier acto del Gobierno golpista de Jeanine Áñez, el empresario conservador Luis Fernando Camacho y el expresidente y excandidato presidencial Carlos Mesa es ilegal”, el agregó
Horas después de brindar una rueda de prensa en Buenos Aires en la que declaró que la orden de aprehensión de la Fiscalía boliviana en su contra es ilegal, Morales insistió en que “los golpistas no cumplieron los procedimientos legislativos, violan sistemáticamente la Constitución, han desatado una persecución política y cometido crímenes de lesa humanidad”.
Todos sus actos son nulos de pleno derecho”, Morales apostilló.
Morales argumentó que “legalmente sigo siendo presidente de Bolivia”, pues mi “renuncia (del 10 de noviembre) no fue considerada por la Asamblea Legislativa como dispone el Art. 161 Num. 3 de la Constitución”.
De haber sido aceptada, tampoco se cumplieron los procedimientos para una sucesión constitucional por lo que Áñez se autoproclamó ilegalmente”, el consideró.
En otro tramo de su mensaje, el expresidente manifestó su agradecimiento a la organización argentina de derechos humanos Madres de Plaza de Mayo tras reunirse con su presidenta, Hebe de Bonafini.
“Estoy profundamente agradecido con las Madres de Plaza de Mayo por su solidaridad con la lucha del pueblo boliviano”, señaló al valorar que “son ejemplo para el mundo”.
Bolivia está envuelta en una crisis política desde el pasado 10 de noviembre, cuando Morales renunció a su cargo, presionado por la cúpula de las Fuerzas Armadas y la policía y luego de varias semanas de protestas de grupos de la oposición por un presunto fraude electoral en los comicios del 20 de octubre que nunca fué probado.
Después de que Morales abandonó su país, la senadora derechista opositora Jeanine Áñez se autoproclamó presidenta sin pasar por los procedimientos legislativos previstos en unas sesiones del Parlamento que no tuvieron el quorum requerido.
La Comisión Nacional para los Refugiados de Argentina trabaja en estos días para conceder el estatus definitivo de refugiado al expresidente boliviano y a la exministra de Salud, Lilly Gabriela Montaño Viaña, quienes llegaron al país el pasado 12 de diciembre.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina confirmó la semana pasada que concedió la condición de asilo a cinco integrantes del equipo de Morales.
Además de Morales y la exministra de Salud, también fueron reconocidos como asilados quien fuera el vicepresidente Álvaro García Linera, el excanciller Diego Pary Rodríguez y el exembajador de Bolivia ante la Organización de los Estados Americanos, José Alberto Gonzales.
Fuente: Sputnik