‘La libertad guiando al pueblo’, ‘Dama de Blanco’ y ‘Kandake’ son algunos de los apodos que recibió la joven estudiante sudanesa Alaa Salah, que se convirtió en el símbolo internacional de la revolución en su patria.
Alaa Salah tiene poco más de 20 años, estudia ingeniería y arquitectura en la Universidad Internacional de Sudán en Jartum. Fue fotografiada el 8 de abril cuando pronunció un discurso ante las mujeres reunidas a su alrededor. La imagen se viralizó rápidamente en las redes sociales en cuestión de horas. A partir de ese momento, Salah fue reconocida como “un símbolo de protesta”.
Según algunas estimaciones, las mujeres representan aproximadamente el 70% de los manifestantes en Sudán. Este grupo está disconforme no solo con la crisis económica, expresada en una escasez de comida, medicamentos, combustible y aumentos de precios sin restricciones, sino también con los intentos de las autoridades por castigar actitudes que no corresponden, según la Policía, con la ‘sharía’, como por ejemplo tener el pelo al descubierto o un vestido insuficientemente largo.
Salah afirma en su cuenta de Twitter: “Soy una joven líder de Sudán y continuaré la lucha”.
También hace referencia al papel de las mujeres en la historia antigua de Sudán. “Si miras el pasado, verás que nuestras reinas gobernaron el Estado, esto es parte de nuestra herencia”, escribe.
Esa es una de las razones por la que la llaman Kandake. Este título lo llevaron reinas del antiguo reino africano de Kush.
Además, la activista hace referencia a los faraones egipcios: “Mi antepasado es Taharqo”, dice, refiriéndose a uno de los reyes kushitas y al faraón de la XXV dinastía en Egipto.
Rossiskaya Gazeta publica que el vestido blanco de Salah tiene un significado especial. Se trata de una túnica blanca de algodón, el principal producto de exportación de Sudán. Es una de las prendas preferida de las mujeres que trabajan en las oficinas sudanesas, por lo tanto, es una referencia a las mujeres profesionistas.
Mujeres de generaciones anteriores se vistieron con las mismas túnicas para marchar por las calles de Sudán contra las dictaduras.
Fuente: Sputnik