El G7 se ha convertido en una sede militar de Estados Unidos para trabajar en estrategias de disuasión contra Rusia y otros rivales, dijo el Ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergey Lavrov.
“Inicialmente, el G7 aspiraba a ser un ‘club exclusivo’, un regulador de la economía mundial,… pero, de hecho, se ha convertido en un cuartel militar estadounidense para desarrollar planes para contener a Rusia, China, Irán y otros rivales de Estados Unidos”, Lavrov dijo en una reunión con estudiantes y profesores del Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú (MGIMO).
Según el ministro, incluso antes de la expansión del grupo, BRICS ya había superado al G7 en términos de PIB acumulado sobre la base de la paridad del poder adquisitivo. “Y el hecho de que el G7 se viera obligado a aceptar la creación del G20 ya es una señal de que los países del grupo se dieron cuenta de que no podían ejercer el poder global absoluto por sí mismos”, agregó.
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Sin embargo, según Lavrov, el G7 está tratando de mantener sus “posiciones inmerecidamente privilegiadas” en el International Monetary Fund (IMF) y la World Trade Organization (WTO), “frenando la reforma de estas instituciones para mantener su influencia dominante sobre ellas.”
“Pero el proceso de pérdida de influencia del G7, nuevamente, es imparable, y continuará”, concluyó el principal diplomático ruso.
Fuente: TASS