Una de las armas más destructivas del arsenal ruso que es capaz de reducir ciudades enteras a cráteres humeantes ha participado en un ejercicio militar realizado recientemente en las profundidades de Siberia.
Los misiles balísticos intercontinentales YARS pueden atacar objetivos prácticamente en cualquier parte del mundo con una precisión mortal.
El nombre del misil es un acrónimo de “Yadernaya Raketa Sderzhivaniya”, que se traduce del ruso como “Misil de Disuasión Nuclear”.
El YARS no solo lleva una carga útil de múltiples ojivas de objetivo independiente (MIRV – multiple independently targetable warheads), las capacidades furtivas del misil y las contramedidas a bordo aseguran que pueda eludir incluso los sistemas de defensa más avanzados.
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Dado que los YARS se pueden lanzar desde plataformas móviles, prácticamente garantiza que cualquier posible ataque preventivo contra la disuasión nuclear de Rusia no privaría a Rusia de estos misiles.
Y en caso de que el enemigo tenga la brillante idea de intentar eliminar los lanzadores móviles YARS con equipos de comando, cada tripulación de lanzadores YARS incluye soldados altamente competentes y bien armados cuyo único trabajo es asegurarse de que nadie interfiera con las operaciones del lanzamisiles.
Fuente: Sputnik
